A costa del bolsillo de los estudiantes, mediante el cobro de inscripciones, reinscripciones, exámenes recepcionales, certificados y constancias, la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH) llega a recaudar cerca de 80 millones de pesos de manera anual.
La gratuidad de la Universidad Michoacana, sustentada en el Artículo 138 de la Constitución Política del Estado de Michoacán de Ocampo, parece ser tan sólo letra muerta para las autoridades de dicha institución, pues año tras año la máxima casa de estudios de la entidad llega a recaudar millonarias cantidades a través del cobro de inscripciones, reinscripciones y diversas cuotas que sirven como condicionante para pertenecer a esta comuna estudiantil.
“Todo individuo tiene derecho a recibir educación. El estado y sus municipios están obligados a impartir educación preescolar, primaria, secundaria, media superior y superior. Toda Educación que el estado imparta será gratuita”, reza Artículo 138 de la Constitución Política del Estado de Michoacán de Ocampo, cuyo contenido respaldó a una estudiante de Biología para que sobre el presente año, consiguiera garantizar la gratuidad de su preparación académica a través de un amparo promovido ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
Este parteaguas en la historia de la Casa Hidalgo parece no haber servido de mucho, pues de acuerdo con el Tesorero de la UMSNH, Adolfo Ramos Álvarez, actualmente el 40 por ciento de los estudiantes nicolaitas responde a un pago de inscripción; además de que un 30 por ciento del estudiantado hace lo mismo en torno al pago de reinscripciones.
Si bien la Universidad Michoacana ofrece la gratuidad para todo aquel estudiante que desee enriquecer su proyección académica desde sus entrañas, las barreras burocráticas y demás requisitos que se requieren para conseguirlo, orillan a los aspirantes a inclinarse por responder a pagos que, con base en el Artículo 138 de la Constitución Política del Estado, no tendrían que saldar.
El desgaste económico para aquellos que deciden responder a las cuotas nicolaitas es variado, pues en cuanto a inscripciones el pago oscila entre los mil 500 y dos mil pesos. En tanto, para reinscripciones el cobro va desde los 500 a los 700 pesos.
Considerando que el cobro de la reinscripción se establece de manera semestral, los costos podrían llegar hasta los mil 400 pesos, en caso de que no se busque la gratuidad en el proceso.
Bajo este panorama, el esquema recaudatorio de la Casa Hidalgo expone que hasta el día de hoy se han obtenido al menos 18 millones de pesos tan sólo en las inscripciones y demás trámites que sirven como plataforma para aquellos que desean formar parte de la comunidad nicolaita.
En relación a lo recaudado en reincripciones, el Tesorero de la UMSNH, Adolfo Ramos Álvarez detalló que el último corte se cerró en un total de siete millones de pesos obtenidos; no obstante, en este proceso la Casa Hidalgo apenas presenta un 70 por ciento de avance, de manera que el monto recaudado podría crecer una vez que se concluya con el mismo.
Lo mismo sucede con el cumplimiento de la tramitología correspondiente a la inscripción, tomando en cuenta que el avance –según Tesorería- alcanza un 85 por ciento hasta el último corte.
En cuanto a trámites con o sin cobro, José Apolinar Cortés, director de Control Escolar de la UMSNH puntualizó que hasta el día de hoy se han consumado un total de 47 mil 250 ingresos efectivos, repartidos entre jóvenes inscritos y reinscritos.
Dijo que de los estudiantes de nuevo ingreso, se contabilizan 12 mil 583 considerando nivel media superior y superior; mientras que en reinscripciones la cifra de alumnos asciende a 34 mil 452.
Con este escenario expuesto, es importante señalar que la recaudación de la Universidad no acaba en los 18 millones de pesos obtenidos en inscripciones o en los siete millones de pesos que corresponden a las reinscripciones, toda vez que a ello se agregan los cobros de exámenes recepcionales, certificados, constancias e incluso los servicios en laboratorios y biblioteca.
La expectativa, según el Tesorero, Adolfo Ramos Álvarez se centra en recaudar al menos 80 millones de pesos, a través de los conceptos que ya se han mencionado en esta nota informativa.
“Está presupuestado para el gasto ordinario entre salarios y gasto operativo de la Universidad”, dijo el funcionario de la UMSNH al ser abordado sobre el destino que se le da al millonario recurso que recauda la Casa Hidalgo.
Recaudación no ataca déficit
Aun cuando la recaudación obtenida a través de los estudiantes alcanza millonarias cantidades, la problemática para la Universidad Michoacana no acaba ahí, pues el Tesorero recordó que dicha institución enfrenta un déficit actual de 738 millones de pesos, además de los 550 millones de pesos que corresponden a la liquidación de prestaciones para el mes de diciembre.
Con el panorama aquí expuesto, se detalla que para subsanar el gasto en nómina de los tres últimos meses de 2016, la Universidad requiere de 730 millones de pesos, por lo que el escenario pinta aún más complicado para cumplir con el pago de aguinaldos en tiempo y forma.
Además de las problemáticas que enfrenta actualmente la Universidad, el escenario que se prevé para 2017 sería aún más complicado, tomando en cuenta que el Gobierno del Estado propuso establecer un recorte presupuestal sobre la Casa Hidalgo por el orden de los 391 millones de pesos.
A consecuencia de esta situación, la nómina de la institución quedaría cubierta hasta el mes de julio de 2017, de acuerdo al informe entregado por el Tesorero de la máxima casa de estudios del estado, Adolfo Ramos Álvarez.
Bajo este tenor, la UMSNH se continúa enfrentando a la toma de la Coordinadora de Universitarios en Lucha (CUL) que se arrancó desde el pasado 29 de agosto, situación que ha impedido corroborar matrícula para gestión y, por ende, ha enrarecido aún más el panorama financiero de la Casa Hidalgo.
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