Maestros expulsados de CNTE luchan por la unificación del magisterio en Michoacán frente a adversidades.
Morelia, Michoacán.- Al menos dos grupos de maestros que fueron expulsados de diferentes expresiones de la CNTE y que posteriormente hicieron sus propios grupos delegacionales, buscan la unificación del magisterio democrático en Michoacán; sin embargo, no han sido respaldados por la base trabajadora.
La mañana de este lunes 4 de marzo, el grupo que dirige Adhid Carreño Avilés, quien fue expulsado de la CNTE Poder de Base, también conocida como “roja”, bloqueó las oficinas centrales de la Secretaría de Educación en el Estado (SEE) y ahí, expuso el siguiente discurso:
“Basta, ya no más colores, vamos con uno solo; todos somos Sección XVIII de Michoacán. Lo tenemos que hacer en la vía de los hechos y cuando haya una sola representacion sindical, no importa el compañero o compañeros que se queden al frente, pero van con respaldo y con respuesta de la base trabajadora y los que nos tengamos que regresar a trabajar, lo tendremos que hacer. Vamos por la unificación del magisterio”.
Posteriormente, Adhid Carreño y un grupo de maestros ingresaron a las distintas oficinas de la SEE y en el área jurídica, hicieron otros pronunciamientos al señalar que los funcionarios de la Secretaría de Educación han ejercido medidas “represivas” en contra del magisterio y que además, no les dan un trato digno.
Se debe destacar que la mayoría de los maestros y trabajadores de la educación que acompañan al profesor Adhid Carreño, son de los llamados “eventuales” y/o “de apoyo”, que no necesariamente tienen un perfil de docente, pero por algún compromiso ya fuera económico o de cercanía con los otrora líderes centistas, les otorgaron plazas y/o horas de secundaria, así como intendencias o puestos administrativos.
Te puede interesar. Maestras de la CNTE se manifestarán el próximo 8 de marzo en Morelia
Ellos, son quienes hoy se manifestaron para exigir que se reactiven las plazas estatales que fueron congeladas a partir del año 2018, cuando el Gobierno del Estado, entonces encabezado por Silvano Aureoles Conejo, anunció que no había techo presupuestal para abrir más plazas y tampoco para mantener las que dejaban maestros jubilados, retirados o que lamentablemente fallecieron.
De 32 mil plazas estatales que había entonces, hoy están activas alrededor de 28 mil, por lo que los maestros exigen que se “descongelen” esas 4 mil plazas que aseguran, serán suficientes para regularizar a los trabajadores eventuales y contratar a los egresados normalistas de forma inmediata.