La diputada señaló que los Telebachilleratos atienden a una matrícula aproximada de 10 mil jóvenes en alrededor de 200 planteles distribuidos en localidades rurales
Morelia, Michoacán. La diputada morenista, Cristina Portillo, presentó ante el pleno del Congreso un exhorto al Ejecutivo Estatal a efecto de que se incluya en el presupuesto de egresos de 2020 un monto de recursos suficientes para que el subsistema de educación media superior del telebachillerato atienda con dignidad su noble labor de acercar la educación a jóvenes de localidades apartadas de la entidad. “Nos parece irracional que la actual administración haya incrementado la cantidad de planteles y que en contra parte, año tras año, plantee presupuestos a la baja para el subsistema”, dijo la legisladora.
Señaló además que los Telebachilleratos atienden a una matrícula aproximada de 10 mil jóvenes en alrededor de 200 planteles distribuidos en localidades rurales. “Pese a las condiciones que enfrentan y las dificultades que tienen los docentes para trasladarse a sus centros educativos, los recortes presupuestales se han hecho en detrimento de las retenciones de los trabajadores del IMSS, INFONAVIT y del SAT, situación que ha generado un adeudo acumulado con estas instituciones” apuntó Portillo Ayala.
Dijo que el tema presupuestal es facultad del Congreso pero señaló que a pesar de ello, en 2018 el Congreso autorizó un presupuesto superior al que en efecto ejerció la Secretaría de Educación en favor de los telebachilleratos. “En aquel año, la legislatura aprobó 146 millones de pesos al Telebachillerato, que inclusive según datos de la cuenta pública 2018 dicha partida se elevó a 156 millones de pesos, pero sólo se pagaron 139 millones, situación que afectó a los trabajadores quienes desde dicho año empezaron a ver problemas en sus pagos en especial los de fin de año”, abundó.
Finalmente dijo que desde el Congreso estarán vigilantes de que las asignaciones presupuestales correspondan a las prioridades de la población, entre ellas la educación. “No vamos a permitir presupuestos ausentes de las preocupaciones de la población, pero tampoco que estos se desvíen, una vez aprobados, a otras partidas que no son las que está representación popular haya determinado. Esa es una facultad del legislativo, que sin duda ejerceremos”.