Los de San Nicolás tienen que remar contra corriente, obligados a ganar en la casa de Rayados mínimo 3-0, si recibe un gol deberá hacer el cuarto, lo cual es un panorama que luce casi imposible ante un cuadro de pocos goles.
Y el marcador le salió barato a Tigres, ya que Rayados bien pudo hacer dos goles más gracias a errores de los felinos, uno de ellos un verdadero “oso”, el del arquero Nahuel Guzmán, que cuando el partido estaba 1-0 en contra, salió jugando el balón pasando el mediocampo y ahí dejó el esférico suelto, para que Cardona desde ahí disparara a puerta; para fortuna del Patón y compañía, la pelota pasó por un lado.
Los felinos tenían la posesión del balón desde el minuto uno, pero Rayados, el Superlíder del torneo, era vertical y letal; cuando más dominaba Tigres, Cardona envió diagonal retrasada a Carlos Sánchez, quien sin marca disparó para el 1-0; pronto los de la UANL se recuperaron, al 19’ Sobis desde linderos empató los cartones.
El equipo de Tuca no lograba concretar, tenía a un Aquino que hizo garras al rival, pero un Gignac que no salió con fortuna y fue Monterrey quien consiguió el segundo tanto, Dorlan, en una jugada individual, engañó a la defensa felina y sacó disparo a primer poste para el 2-1 al 38’.
En la parte complementaria, cuando los universitarios anhelaban el empate, Juninho hizo el otro “oso”, al 57’ abanicó y le dejó el balón a Sánchez, pero rápido llegó Torres Nilo a tapar lo que parecía el tercero.
Los auriazules tuvieron sus oportunidades de igualar, pero Jonathan Orozco se lució tapando tres claras de gol, un cabezazo de Pizarro, un disparo de Sobis, otro remate con la testa de Ayala y por si fuera poco, Gignac falló al mandar por un lado su disparo pegado a línea de fondo.
La historia no terminó ahí, Rayados puso lo que puede ser el último clavo al ataúd, cuando al 84’ Funes Mori de media vuelta hizo el tercero, ante un aquero que quiso achicarle y no logró su cometido.