El tiempo avanza y quedan menos días para la “elección madre” que se realizará el 1 de julio de este año, al aproximarse la fecha electoral más propaganda política es difundida a través de los grandes medios de comunicación y en mayor medida los probables candidatos tratan de publicitarse más y para ello entre otras cosas promueven algunas propuestas o proyectos políticos.
Es en esto último donde los ciudadanos deben tener puesta la mayor atención posible, más que en los spots de la televisión o las canciones para promocionarse, se debe de poner un gran enfoque en la presentación de proyectos políticos que promuevan cada uno de los candidatos.
Las propuestas, su equipo de trabajo, sus antecedentes políticos y administrativos, todo ello es lo que más debe concernir a la sociedad en esta época electoral. Desde luego, siempre habrá ciudadanos que prefirieran fijarse en otras cosas distintas, como la imagen propagandística o el partido que está promoviendo al candidato, pero lo idóneo es que estos ciudadanos sean tan solo una pequeña minoría frente a un gran grupo que tenga en consciencia el proyecto político de la persona a quién planean apoyar en las urnas.
Todos los ciudadanos deben de empezar a dejar ya la apatía política, al final son los ciudadanos los que conforman la base sobre la que se cierne el Estado mexicano que es el que toma las decisiones del ámbito público que directamente repercuten en el día a día de todos los miembros de la sociedad mexicana.
Y es precisamente la apatía política una de las principales causas del declive sociopolítico que hoy en día sufre México. No es que los ciudadanos necesariamente se posicionen en favor o en contra de algún candidato a la hora de votar, sino que desarrollen consciencia de lo que significan los distintos proyectos políticos que se presenten a lo largo de la contienda.
Por ejemplo, si ningún proyecto político convence a un grupo de ciudadanos, es válido que decidan acudir a votar pero decidan anular su voto o incluso emitir algún voto de castigo si así lo consideran. Aunque sin lugar a dudas lo más importante es no limitarse a participar políticamente en la jornada electoral, sino estar constantemente observando la actitud del bloque vencedor al momento de asumir el mando y poner en marcha su proyecto político.
El pueblo mexicano ya debe de hacer más que simplemente acudir a las urnas, incluso si lo hace con una conciencia y reflexión profundas sobre los distintos proyectos políticos, debe también asegurarse que a lo largo del nuevo sexenio, sin importar quién gane esta contienda, se cumpla de manera efectiva el proyecto político por el que más se haya votado.
Así mismo los ciudadanos deberán exigir al ganador que se comporte conforme a los principios de la ley y de los derechos humanos al momento de ejercer el poder.
La ciudadanía tiene la responsabilidad no solo de votar sino de estar exigiendo a sus autoridades que actúen como la ley de indica, y presionar siempre para que la esfera gobernante cumpla con su palabra, de lo contrario la democracia mexicana permanecerá tal y como está hoy, inacabada y con grandes pendientes en cuanto a seguridad, justicia social, derechos humanos, entre otros temas importantes.