Foto: LIGA Bancomer MX

Con autoridad y superioridad, la escuadra de Tigres de la UANL se convirtió en el primer semifinalista del Apertura 2016, tras masacrar por 4-0 a los Pumas de la UNAM (global 7-2) en duelo celebrado sobre el pletórico Estadio Universitario que fue un volcán de fiesta y júbilo por el resultado que los metió entre los cuatro mejores del torneo en pos del título y convirtiéndose en una gran aspirante.

Fue un partido de un solo lado, redondo y sobresaliente del conjunto de la Sultana del Norte que no tuvo piedad para derrotar a Pumas, además terminó por fin la sequía de goles del francés André-Pierre Gignac 3’ 74’ 78’, quien no lograba anotar desde la Jornada 9 y hoy marcó un triplete con goles firmados al 3’, 74 y 78’, así el el gol de su compatriota Andy Delort 84’ y el autogol de Darío Verón al 25’.

El duelo fue de pesadilla para Pumas que registró una nula productividad ofensiva que nunca logró pisar el área rival, pues Nahuel Guzmán fue un espectador más, además le dieron demasiadas concesiones a sus rivales que se dieron gusto, Pumas ni las garras metió.

Tigres fiel a su estilo con la posesión de la pelota inutilizaron a sus rivales y gracias a la potencia ofensiva de Guido Pizarro, Jesús Dueñas, Javier Aquino y Jurgen Damm fueron amos del partido.

 


Fiesta francesa

Apenas a los 3 minutos Tigres marcó el 1-0, luego de un excelente servicio de Javier Aquino y de tres dedos marcó Gignac para terminar con la sequía de goles.

Luego a los 25’ minutos una desafortunada jugada de Darío Verón que marcó en su propia portería, tras intentar romper un centro de Aquino al área para irse al descanso con la ventaja de 2-0.

Para la parte complementaria, Tigres mantuvo el orden en medio campo y con el mismo estilo de juego de toque de conjunto mareó a sus rivales que fueron incapaces de reaccionar.

Gignac tuvo para aumentar a los 65 del tiempo corrido pero su disparo fue demasiado colocado a la portería del ‘Pikolín’ Palacios, se salvó Pumas,

Pero luego a los 75’, el francés recuperó la brújula y marcó el 3-0, tras un gran servicio al área de Damm, Pumas ya estaba en la lona.

Cuatro minutos más tarde, Giganc ahora conectando con su compatriota Andy Delort, hizo el 4-0 para su triplete.

Ya definido el encuentro, Ferretti optó por sacarlo y salió ovacionado y arropado por su afición que aguantó a pie firme la ligera llovizna que cayó en el Volcán que nunca se apagó de ovacionar.

Pero todavía hubo tiempo para más, Delort puso el 5-0 definitivo a los 89’ y dejó claro que Tigres es un firme candidato al título. Ante Pumas, solo fue un golpe de autoridad y que ni las garras metió.