Tatiana expresa su apoyo tras la denuncia de violencia familiar de Alicia Villarreal.
Ciudad de México.-Durante un concierto en Michoacán, Alicia Villarreal, la reconocida cantante mexicana, hizo una señal de auxilio por violencia familiar, mostró su palma con el dedo pulgar doblado y el puño cerrado, un gesto que no pasó desapercibido, por ello, la también cantante Tatiana expresó apoyo a Villarreal.
Las imágenes de la exvocalista de Límite se difundieron rápidamente, y se reveló que Alicia había presentado una denuncia por violencia doméstica contra su esposo, Cruz Martínez. Además, se supo que fue llevada al hospital antes de su acto debido a las lesiones que sufrió.
Tatiana Palacios Chapa, conocida artísticamente como Tatiana, quedó impactada por los hechos. Inicialmente, se mostró cautelosa al hablar, pero finalmente expresó: “Se comenta, ¿pero ella no ha dicho?… Pues mejor no, no, mejor no opino porque yo de esas cosas, si no lo he oído de su propia boca, no puedo opinar, pero ¡ánimo!, amigas unidas, jamás serán vencidas”.
Tatiana continuó, enfatizando la importancia de la información y el apoyo mutuo entre mujeres:
“¿Sabes qué?, me gusta mucho que las nuevas generaciones, bueno, algunas, no todas, lamentablemente, pero se informan muy bien, y ya no se dejan, son nuevas generaciones que tienen opciones, que ya saben que no merecen ningún maltrato, y que merecen ser felices y vivir en paz, mentalmente, físicamente, económicamente, de todo, pues que no están solas, y que si no tienen familia, porque a veces las familias mismas no las apoyan o no los apoyan, que hay muchas instituciones gratuitas que las apoyen”.
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Finalmente, la presentadora de televisión ofreció un mensaje alentador: “Entonces pues, ánimo, adelante, que no se dejen vencer por nada, se tarda uno, pero, al final sabes que vale la pena haber huido de una relación y una situación así”.
Tatiana, oriunda de Monterrey, Nuevo León, no solo es una figura querida en el ámbito infantil, sino también una sobreviviente de abuso. Después de casarse en 1990, vivió una pesadilla con su entonces pareja, Andrés Puente. En 2001, aprovechando la ausencia de Puente, escapó con sus hijos, superando años de abuso y control.