La sostenibilidad financiera pública se perfila como el desafío central para la siguiente administración en México, señaló el CEESP
Ciudad de México-El Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP) ha expresado su preocupación por la sostenibilidad financiera pública, la cual podría ser el principal desafío para el próximo gobierno de México.
El CEESP, que asesora al Consejo Coordinador Empresarial (CCE), ha señalado que la administración actual ha incrementado los compromisos presupuestarios sin contar con fondos propios.
Con las elecciones de 2024 en el horizonte, representantes del CEESP compartieron que el déficit gubernamental alcanzó los 7.1 billones de pesos. Además, se prevé una reducción del 8.8 por ciento en el gasto público en 2025, una repercusión directa del fin de los megaproyectos emblemáticos.
El 23 de octubre de 2023, el CEESP alertó sobre la necesidad de subsidios para el Aeropuerto Felipe Ángeles y el Tren Maya en los años venideros, cuestionando la asignación de recursos y la limitada inversión en otras áreas vitales como la salud y la educación, a pesar de una recaudación elevada.
Por otro lado, Gabriel Yorio, subsecretario de Hacienda, en un evento con inversores del banco HSBC el 16 de mayo, defendió la gestión de las finanzas públicas, destacando una reducción del 21 por ciento del PIB en la deuda externa.
A pesar de la confianza del subsecretario en la flexibilidad fiscal post-electoral, el CEESP enfatizó el debilitamiento de la actividad económica. El crecimiento de ingresos del 9.6 por ciento, acorde a los Criterios Generales 2025, contrasta con un gasto público que ha generado interrogantes.
El CEESP criticó la eficacia de los programas de asistencia y proyectos sociales implementados por el gobierno, que parecen más enfocados en mantener el apoyo de sus simpatizantes, incrementando el gasto total en un 23.2 por ciento al final del sexenio.
Para el año fiscal que sigue a las elecciones, se estima que el gasto público total será del 8.8 por ciento.
El sector privado ve esta disminución como resultado del término de los megaproyectos. No obstante, recalcan la importancia de enfocar los recursos en sectores críticos como la salud, educación y seguridad para asegurar la sostenibilidad financiera pública.