México de forma rápida debe incluirse en la nueva economía post-covid que tiene que verse vinculada a nuevas formas de creación de riqueza, que permitan garantizar el mantener la mayor parte de los activos dentro del sistema y que, por otro lado, garanticen el respeto a la biodiversidad y el entorno. Es indispensable crear el marco regulatorio y la batería de medidas prácticas para con ellas facilitar al sector privado mediante estímulos fiscales y operación institucional avanzada, convertirse en entes corresponsables de la sostenibilidad, valorando así de mejor manera activos y productos que deriven de procesos respetuosos del entorno y
provean, al mismo tiempo, una mayor temporalidad en el uso de materiales y equipos. Es necesario reinterpretar la cadena de valor, para que las calidades de origen y su posible reutilización sean base de mayor y mejor precio en relación a la competencia que adolezca de
dichas condiciones.
Nuevas economías
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