No les va a quedar de otra al PRI y al PAN que buscar un pacto en lo oscurito si quieren ser competitivos frente a AMLO en la elección presidencial.
Quedan 38 días para las elecciones. La ventaja del abanderado de la coalición Juntos Haremos Historia es amplia, a juzgar por el último corte del llamado “Poll of Polls” realizado por la página Oraculus.
Sin alianza le hacen los mandados al tabasqueño.
Hablan los resultados de las últimas encuestas combinadas por Oraculus:
Andrés Manuel recoge entre el 41 y el 47% de las preferencias electorales.
Le sigue Ricardo Anaya con 27-31 por ciento. Meade se ubica más atrás, con 18-22 por ciento. El Bronco, tres por ciento.
- Una fuente de alto nivel de la coalición Por México al Frente (PAN-PRD-MC) nos dijo ayer que, aunque las cúpulas lo nieguen públicamente, “sí hay esa discusión” para lograr un pacto PRI- PAN.
La idea es empujar al candidato que claramente se perfile como segundo lugar en el último tramo de la campaña.
La fuente nos asegura que hay negociaciones desde hace tiempo con priistas que están abiertos a esa alianza y que se identifican con Luis Videgaray.
En el polo opuesto, decididamente en contra, estaría Aurelio Nuño, que es la voz del presidente Enrique Peña Nieto, según la misma fuente.
El propio coordinador de la campaña de Meade negó, tajante, que hubiese contactos con los anayistas, cuando le consultamos sobre el tema.
En el seno del Frente “van ganando de calle los que sí quieren”, precisó.
Dio nombres: Damián Zepeda, Fernando Rodríguez Doval, Santiago Creel, ADN, Los Chuchos y otros más, aunque lo nieguen.
“Todos tienen interlocutores diferentes dentro del equipo de Meade”, puntualizó.
Los frentistas que van en contra de la alianza con el PRI, con el argumento de que es más rentable electoralmente pegarle al presidente Peña, son un puñado:
Agustín Basave, Jorge Castañeda, Emilio Álvarez Icaza, Alfredo Figueroa y el panista Héctor Villarreal.
-¿Y Dante Delgado?
-La está midiendo.
- El panista Santiago Taboada, un joven con sentido político que aspira a convertirse en el primer alcalde de Benito Juárez, en la Ciudad de México, admitió que, sin los votos del PRI, no hay manera de que Anaya sea presidente.
El candidato presidencial del Frente, sin embargo, cometió un error al prestarse al juego de los reporteros y decir que, si llega a Los Pinos, va a meter a la cárcel a Enrique Peña.
Al Presidente de la República no le gustó ni tantito la declaración del panista. Ya de por sí le revolvió el estómago la voltereta que dio en el tema del Pacto Por México.
Anaya fue promotor activo de las reformas estructurales que ahora rechaza.
Hay quien asegura que Peña Nieto ha comentado en corto que con Anaya ni a la esquina. Le tiene ojeriza.
Pero no está dicha la última palabra. Hay mucho en juego. El abanderado del Frente no tiene asegurado el segundo lugar, aunque, si la elección fuese mañana y hubiese segunda vuelta, él pasaría.
Pero quedan 39 días y un debate. El PRI tiene 15 gobernadores. Los del Frente (PAN y PRD) son 16. El Verde, uno. Morena, ninguno. ¿De qué lado van a jugar?
No es un dato menor en términos de movilización electoral. Lo vimos en el 2006, cuando mandatarios del PRI, junto con la maestra Elba Esther Gordillo, operaron en favor de Felipe Calderón.
- La incorporación del extitular de la Fepade, Santiago Nieto, al equipo de AMLOdebe haber puesto nerviosos a varios.
No hay que olvidar que al exfiscal electoral lo quitaron del cargo a la mala, con el pretexto de que hizo público un escrito que le envió el exdirector de Pemex, Emilio Lozoya.
Lozoya enfrenta acusaciones hechas por altos funcionarios de la empresa Odebrecht de haber recibido 10.5 millones de dólares de moche en 2012. Hubo denuncias de que ese dinero fue a dar a la campaña del abanderado del PRI a la Presidencia de la República.
Desde la salida de Santiago Nieto la investigación sobre Odebrecht se fue a la congeladora, a pesar de que el exprocurador general de la República, Raúl Cervantes, reveló a los senadores que la investigación estaba concluida y que pronto vendrían las imputaciones, lo que no ocurrió.
AMLO ya dijo que, si llega, se va a reabrir esa investigación, pero no en un afán de “venganza”, sino de justicia.
- Al doctor José Narro Robles no se le escapó hablar en Ginebra, Suiza, de la “crisis de valores” que se vive y que la salud no es ajena a ello.
“La salud no es una mercancía y el mercado no debe definir su rumbo”, señaló el secretario de Salud durante su participación en la 71 Asamblea de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
El exrector de la UNAM fue más lejos al describir esa crisis como crisis de valores, y llamó a impedir que esas “enfermedades contagiosas” que nos aquejan se instalen en la sociedad: la exclusión, el odio, la codicia, el fanatismo.
¿Estaría pensando en el virus Trump? ¿En el virus Maduro? ¿En el virus Netanyahu? ¿O en el virus Al-Assad?