El Secretario del Gobierno, Carlos Herrera Tello destacó que si la familia lo decide, existirá seguridad para que puedan regresar a su hogar
Morelia, Michoacán.-Luego que ayer, circulara en redes sociales un videoclip dónde un joven denunciaba la agresión que había recibido su padre quien es médico y toda su familia en el municipio de Paracho, por parte de comuneros esto debido a que lo acusaban de haber aplicado una inyección con COVID-19 a un paciente, el Secretario del Gobierno, Carlos Herrera Tello puntualizó que se castigará a los agresores.
El funcionario estatal, indicó que es reprobable este tipo de conductas, mencionando que los médicos han sido pieza clave para la lucha contra está enfermedad, por lo que aseguró la agresión no quedará impune y se castigará con todo el pedo de la ley.
Destacó que entiende el miedo y la irritación que genera el virus, sin embargo destacó que esto no puede ser justificación para atacar a personal médico, el cual expone su vida y la de sus familiares para apoyar y cuidar la de otros.
“Totalmente reprobable cualquier uso de la violencia física, emocional, que se haga sobre otro ser humano por cualquier cosa. En este caso es por ignorancia entendiendo y claro, hoy todos tenemos miedo por el covid-19”, dijo.
Herrera Tello agregó que la Fiscalía General del Estado inició una carpeta de investigación en torno al tema y comentó que si la familia solicita protección, el gobierno estatal brindará las facilidades para que la familia pueda regresar al hogar sin temor alguno.
“La investigación se encuentra en marcha y estoy seguro que muy pronto habrá claridad y habrá responsabilidad sobre quienes agredieron a otro ser humano que además pues son personas que nos cuidan, son nuestros héroes igual que los emprendedores, los médicos, las enfermeras y el personal de salud son nuestros héroes”, finalizó.
Según información dada a conocer en el vídeo, cerca de 20 comuneros de Ahuirán, acudieron al domicilio del doctor para comenzar a agredirlo verbalmente, en determinado momento comenzaron los golpes, no sólo a él sino a toda su familia, por lo que abandonaron la ciudad.
El doctor habría suministrado una inyección de dexametazona a un paciente que presentaba síntomas de COVID-19, esto con el fin que pudiera respirar, sin embargo minutos después murió, ocasionando que se corriera el rumor que había sido infectado por el propio médico.