Más allá del desfogue de ánimos, la reunión no despejó dudas de quienes las tenían sobre el manejo de las finanzas del Congreso de Michoacán
Morelia, Michoacán.- El cónclave de diputados locales para la revisión de la situación de las finanzas en el Congreso del Estado de Michoacán concluyó sin grandes revelaciones, por lo que los señalamientos sobre un presunto quebranto o déficit en la Cámara quedaron sólo a nivel de dichos.
El encuentro realizado en el Hotel Fiesta Inn en Altozano de Morelia, sirvió para que 28 de los 40 diputados compartieran su último desayuno de Legislatura con cargo al erario, emitieran reproches entre sí, y cuestionaran a la secretaria de Finanzas del Congreso, Rocío Pineda Gochi por la falta de información.
Pero más allá del desfogue de ánimos, la reunión no despejó dudas de quienes las tenían sobre el manejo financiero en la Cámara, y los participantes aceptaron la información presentada en gráficas por Rocío Pineda Gochi, quien no les entregó a los asistentes documentos en físico para que pudieran revisarlos.
Incluso en la reunión, no hizo acto de presencia la diputada Belinda Hurtado Marín y el diputado Juan Carlos Barragán Vélez, ambos integrantes del Comité de Administración y Control. La primera fue quien habló de un presunto quebranto o déficit en la Cámara por hasta 300 millones de pesos, y el segundo acusó que la presidenta de la Junta de Coordinación Política, Anabet Franco Carrizales, junto con los diputados Marco Polo Aguirre y Jesús Hernández tenían secuestrada la información financiera del Congreso.
En el encuentro tampoco estuvo presente Anabet Franco, quien preside el órgano de gobierno del Congreso encargado del manejo financiero de la Cámara.
Aun y cuando de parte de algunos diputados existió molestia por la falta de información, e incluso se dieron señalamientos de que la pretensión de los inconformes era “arañar” el presupuesto, la reunión transcurrió sin avances significativos.