Socios del Restaurante Bar, Casablanca, aseguran ser respetuosos de la ley, pero admiten que abrieron sus puertas sin contar con el permiso municipal
Morelia, Michoacán.- Socios del Restaurante Bar, Casablanca, aseguran ser respetuosos de la ley, pero admiten que abrieron sus puertas en marzo pasado sin contar con el permiso municipal, en el Centro Histórico de Morelia, pese a ello el presidente de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera en Michoacán (Canirac) Gerardo Salvador Bustos Pineda abogó para que el Ayuntamiento les permita trabajar.
“Desde marzo presentamos nuestra documentación, pagando derechos y requisitos que la ley marca, por lo cual siempre hemos sido respetuosos” mencionó Leonardo Vázquez, socio del lugar.
El negocio que otorga 25 empleos directos y 80 indirectos, según Leonardo, tiene 15 días suspendido oficialmente, tras la clausura y multa que la Dirección de Inspección y Vigilancia les propinó por no contar con el permiso municipal, lo que implica una pérdida económica para los inversionistas.
Con ello sostuvo que cuentan con el 80 por ciento de la anuencia vecinal, requisito que marca el reglamento municipal, por lo que no ve como un impedimento que el Cabildo de Morelia les otorgue la anuencia, pues también tienen en regla todos los demás requisitos.
Tras respaldar a los socios del Casablanca, el titular de Canirac, enfatizó en que Morelia es un destino turístico, y el restaurante es una opción gastronómica viable para el Centro Histórico, que debe ser respaldada por los vecinos, por lo que invitó a los inconformes con el establecimiento a conciliar y llegar a un acuerdo.
“Únicamente es que se concilie con los inconformes y se llegue a un acuerdo, no pueden decidir sobre la ley, si cumple con el 80 por ciento de las firmas, una persona no puede decidir” por los demás vecinos, recalcó Bustos Pineda, agregando que “la autoridad no puede estar al contentillo de los vecinos que se oponen a la inversión”.
Para Bustos Pineda las licencias tipo C con venta de alcohol se otorgan con mucha lentitud por el Ayuntamiento de Morelia, al tener que pasar por la aprobación de todo el Cabildo, lo que provoca “un cuello de botella” que entorpece la inversión en la capital michoacana.
Ingresa a. Restaurante Casablanca abrió sus puertas sin tener permiso municipal
El evidenciar lo que pasa con la propuesta del Casablanca resumió, es porque a los vecinos inconformes se les ha dado cobertura mediática, y los socios del restaurante también tienen derecho de réplica, por ello su respaldo al negocio, más allá de si abrieron sus puertas sin contar con el permiso municipal.