Esfuerzos continuos en la restauración patrimonio cultural de México tras los sismos de 2017.
En 2017, dos sismos de gran magnitud sacudieron México, dañando severamente 3,269 sitios de patrimonio cultural en 11 estados, incluidos Chiapas, Guerrero, Puebla, Estado de México, Ciudad de México, Morelos y Oaxaca; Alejandra Frausto, titular de la Secretaría de Cultura, destacó que muchos de estos lugares ya enfrentaban problemas de mantenimiento antes de los sismos, lo que complicó las labores de restauración.
Durante una conferencia reciente, Frausto informó sobre las estrategias de reconstrucción adoptadas.
Según Frausto, la ausencia de un censo completo y de registros de intervenciones anteriores obstaculizó la evaluación de daños y la planificación de reparaciones. Además, el cierre de espacios de culto interrumpió la vida comunitaria y social.
“La falta de empresas y mano de obra especializada exacerbó la situación, ralentizando el proceso de restauración”, explicó.
Para abordar estos desafíos, la Secretaría de Cultura implementó varias estrategias: un censo preciso para documentar daños, un inventario y resguardo de bienes culturales, fortalecimiento de la capacidad institucional, desarrollo de capacidades locales para restauración y mantenimiento, recuperación de técnicas constructivas tradicionales y trabajo colaborativo con las comunidades, incluyendo un manual de mantenimiento preventivo.
Se adoptó un enfoque integral y colaborativo, formando un equipo con Sedatu, gobiernos estatales, autoridades religiosas y las comunidades.
Hasta la fecha, se han restaurado 3,037 inmuebles, lo que representa un 92.9% de avance, con una inversión de 10,200 millones de pesos. Además, se han atendido 4,400 de los 4,874 bienes muebles identificados, generando 56,505 empleos.
El progreso por estado incluye: Morelos con 181 obras, Oaxaca con 308, Chiapas con 34, Ciudad de México con 158, Estado de México con 42, Puebla con 192, Tlaxcala con 35 y Guerrero con 24.
“A pesar de los retos, continuamos trabajando para preservar nuestra herencia cultural para las futuras generaciones”, concluyó Frausto.