Analizan los riesgos de salud ante la falta de regulación en remedios herbales
Estados Unidos.-Recientemente, los remedios herbales han cobrado popularidad como alternativa a los tratamientos médicos tradicionales. A pesar de su creciente uso, la ausencia de una regulación adecuada en el mercado de suplementos botánicos presenta preocupaciones significativas para la salud pública.
Un estudio realizado por la Universidad de Michigan ha destacado esta problemática, especialmente en los Estados Unidos, donde se estima que más de 15 millones de personas usan tratamientos herbales que podrían dañar el hígado.
Un total de 9,685 individuos participaron en la Encuesta Nacional de Examen de Salud y Nutrición de Estados Unidos, donde se investigó la prevalencia y las características clínicas de los consumidores de productos botánicos potencialmente hepatotóxicos.
La investigación también incluyó un análisis de los motivos detrás del uso de estos suplementos dietéticos herbales (HDS) y cómo estos contribuyen al incremento del riesgo de daño hepático.
Dirigido por Alisa Likhitsup, hematóloga de la Universidad de Michigan, el equipo descubrió que el consumo de remedios herbales es más común entre personas que padecen enfermedades crónicas como diabetes y artritis, y generalmente entre los 40 y 60 años.
Los remedios estudiados se utilizan frecuentemente para manejar condiciones como colesterol alto, depresión y dolor. Según la encuesta, el 57.6% de los encuestados usa HDS, destacando productos como la cúrcuma, el extracto de té verde, el ginseng indio, la garcinia cambogia, el arroz de levadura roja y el cohosh negro.
La cúrcuma es particularmente popular para aliviar dolores articulares debido a sus propiedades antioxidantes y antiinflamatorias. Sin embargo, estudios clínicos anteriores no han confirmado la eficacia de los productos que contienen cúrcuma para tratar la osteoartritis.
No obstante, la falta de regulación en la industria de los remedios herbales sigue siendo un problema considerable. Además, el estudio señaló que las lesiones hepáticas causadas por el consumo excesivo de estos productos son difíciles de diagnosticar en etapas tempranas.
Cuando el daño hepático se agrava, el hígado pierde su capacidad para procesar la bilirrubina adecuadamente, lo que resulta en un tono amarillento de la piel, acompañado de síntomas como cansancio, falta de apetito y pérdida de peso.
Entre 2004 y 2014, las incidencias de daño hepático inducido por medicamentos debido a suplementos botánicos se incrementaron del 7% al 20% en los Estados Unidos.
Likhitsup advirtió que:
“La seguridad y eficacia de los suplementos herbales y dietéticos no están bien establecidas debido a la falta de requisitos regulatorios para ensayos clínicos prospectivos o farmacocinéticos en humanos antes de su comercialización”.
Aunque aproximadamente el 40% de los medicamentos aprobados y en uso actualmente provienen de productos naturales, la Organización Mundial de la Salud (OMS) aclara que “natural no siempre significa seguro”.
La Biblioteca Virtual en Salud en Medicinas Tradicionales estima que más del 80% de la población mundial ha recurrido a conocimientos tradicionales para el autocuidado. Desde 2018, 170 de los 194 países miembros de la OMS reconocieron el uso de la medicina tradicional y solo 124 países cuentan con legislación vigente para su regulación.