Descenso del 30% en el lavado de dinero criptomonedas durante el último año.
En 2023 se registró una disminución del 30% en el lavado de dinero utilizando criptoactivos, lo que representa una cifra de 22 mil 200 millones de dólares, según revelaciones de Chainalysis.
La firma de análisis de blockchain indica que el 72% de los criminales optan por cinco principales servicios de transferencia para cambiar cripto a moneda convencional.
Monitoreo de transacciones cripto a través de bolsas centralizadas
La información del informe anual sobre criptocrimen de Chainalysis muestra que los intercambios centralizados son el principal canal para la conversión de criptomonedas a divisas tradicionales, como el dólar.
A pesar de un aumento en el lavado de dinero dentro del ecosistema cripto en 2021, que representó el 70% de todas las transacciones según CBER, las bolsas centralizadas han sido eficientes en el rastreo de operaciones sospechosas.
Las regulaciones y medidas como el AML, o ‘contra el blanqueo de capitales’, permiten que las transacciones ilícitas identificadas sean suspendidas.
Esto conduce a que los cibercriminales busquen métodos alternativos para ocultar sus actividades y continuar con el blanqueo de fondos, señaló Chainalysis.
“Las bolsas centralizadas ofrecen oportunidades para congelar e incautar criptoactivos asociados a actividades ilícitas”, subrayó Kim Grauer, director de investigación de Chainalysis.
Estrategias de grupos delictivos frente a nuevas regulaciones
Las bolsas centralizadas, pese a ser un objetivo reciente dentro del ecosistema cripto, enfrentan tácticas renovadas por parte de los criminales. Estos utilizan múltiples cuentas para dispersar sus fondos, resultando en que mil 424 direcciones recibieran más de un millón de dólares en criptomonedas ilícitas durante 2023, de acuerdo con Chainalysis.
Kim Grauer, director de investigación de la empresa, resaltó el incremento en el lavado de dinero a través de canales emergentes como las finanzas descentralizadas (DeFi), que aunque representan el 13% del total del lavado con criptomonedas, han visto una disminución en el valor de los fondos robados en otras actividades delictivas.
Las DeFi, aunque menos prevalentes en el lavado de dinero criptomonedas, son clave en las operaciones del crimen organizado para mover fondos entre billeteras. Chainalysis mencionó específicamente el robo y blanqueo de capitales por el Grupo Lazarus, con sede en Corea del Norte.
La vigilancia de las criptomonedas sigue siendo una de las herramientas más efectivas en la lucha contra el criptocrimen.