La efectiva fiscalización impulsa la recaudación de grandes contribuyentes en 2024.
Ciudad de México.-El Servicio de Administración Tributaria (SAT) ha informado que, gracias a la prosecución del programa de fiscalización a grandes contribuyentes, se han obtenido 359 mil 25 millones de pesos de enero a mayo de 2024. Esto significa un aumento de 261 mil 563 millones de pesos en comparación con el mismo lapso del año previo.
La revisión fiscal enfocada en compañías con ingresos superiores a 1,800 millones de pesos anuales, se ha enfocado en 18 ramas de la economía, incluyendo sectores como el acerero, automotriz, de construcción, de electrónicos y financiero.
A pesar de que las entidades comerciales muestran preferencia por la autoregulación frente a las medidas de control fiscal, el SAT mantiene la regularización de estas, habiendo conseguido la regularización completa o parcial de 377 grandes firmas en el periodo mencionado.
En cuanto a los demás contribuyentes, las estrategias de fiscalización han resultado en una suma recaudada de 109 mil 927 millones de pesos, de los cuales 29 mil 298 millones provienen del comercio internacional.
Estas acciones son clave para detectar prácticas de evasión fiscal de manera oportuna, especialmente en sectores de alto riesgo y en la vigilancia constante de entidades bajo regímenes especiales de comercio.
Los grandes contribuyentes representan el 52 por ciento de los ingresos fiscales totales, sumando un billón 113 mil 816 millones de pesos de enero a mayo de 2024.
Es destacable que el 24 por ciento de estos ingresos provienen de las retenciones del impuesto sobre la renta (ISR) por nóminas.
Es relevante destacar que los grandes contribuyentes son los encargados de recolectar el IVA de los productos y servicios gravados que ofrecen, siendo este tributo pagado por los consumidores y posteriormente entregado al SAT.
El incremento en la recaudación tributaria es consecuencia de la solidificación del Plan Maestro 2024, el cual tiene como objetivos optimizar la captación de impuestos, ofrecer un servicio de calidad a los contribuyentes y eliminar prácticas que minan la base imponible.