Morelia, Michoacán.- El presidente del Colegio de Arquitectos de Michoacán, Pedro Núñez González, consideró que la construcción del Libramiento Sur de Morelia en su tramo Ramal-Camelinas es una solución al conflicto de la movilidad de los vehículos, pero no necesariamente responde a una solución de un problema para todos los morelianos.
En entrevista posterior a la firma de convenio con la asociación civil Forópolis, el presidente del Colegio de Arquitectos de Michoacán detalló, “Morelia en este momento, y más en tiempos electorales, empiezan a suceder situaciones como el de la conexión con Santa María. A mí me parece que, en general, y puedo decir con contundencia, que definimos las cosas por percepción y no con información. El problema de proyectos de este tipo empieza desde la manera como se define la necesidad, en donde no participa la ciudadanía, en donde es una directriz de la administración estatal, federal o municipal, y no hay la socialización del tema”.
Y añadió, “creo que ese tipo de proyectos que impactan tan fuertemente en la ciudad, pueden solucionar algunas cosas, pero también se debe de identificar que otras van a generar, y que se prefiere, o sea los impactos deben de ser muy medibles para poder actuar en consecuencia”.
Insistió en que el Ramal-Camelinas podría solucionar el conflicto de la conectividad con Santa María para los automóviles, pero aclaró que ello no resuelve una necesidad que sea común a los morelianos.
“Parte de polémica, aparte del tema ecológico, del tema ambiental, es qué solución se le va dar al volumen de autos que van a estar en la parte baja de la ciudad, cómo se van a conectar y no se tienen las herramientas. Hay un plan de cómo conectar, pero seguimos pensando en el automóvil, creo que el costo de ese tipo de obras, si se entendieran las necesidades de una ciudad, si se entendiera el universo de personas que vivimos en ella, creo que hay otras alternativas a ese tipo de soluciones, porque podríamos impactar a más gente con esos recursos”, explicó.
Concluyó que “el crecimiento de las ciudades es sumamente vertiginoso y por momentos se desborda porque no hay los instrumentos que puedan trabajar a esa velocidad”, consideró que, en Morelia, el crecimiento urbano desordenado se debe al alto porcentaje de autoconstrucciones, así como a los asentamientos irregulares.