Para Pumas nada. Ni liderato de goleo ni liguilla, menos una despedida honrosa del Clausura 2017. Quebrado, el equipo universitario perdió por 1-0 frente al último lugar de la tabla, Puebla.
Lo único atractivo en el partido entre el penúltimo y último lugar de la tabla era saber si Nicolás Castillo conseguía la hombrada de terminar como líder de goleo. El chileno se quedó con ocho tantos en su primer torneo en México, apenas rozó el esférico en el enfrentamiento ante el Puebla y en el minuto 73 dejó ir la más clara, la que se habría significado empatar con nueve goles a Raúl Ruidíaz, el mejor artillero del Clausura 2017.
La fiesta era para Pumas y se la robó Puebla. La clave del único gol del partido fue un ex jugador de los Pumas, forjado en la cantera y expulsado del equipo desde hace varias temporadas, Carlos el ‘Charal’ Orrantía se paseó por Ciudad Universitaria cuantas veces quiso.
En el primer tiempo se escapó por el lado derecho y estuvo cerca de festejar gol en contra de Pumas. Alfredo Saldívar salvó la cabaña de los auriazules. En el complemento no hubo perdón. Diecinueve segundos del segundo tiempo fueron suficientes para que Orrantía escapara por el lado derecho y enviara un centro que Francisco Torres conectó para hacer el 1-0. Poco para dejar tirado a los dirigidos por Francisco Palencia.
En el lado de Pumas, el que estuvo más cerca del gol fue José Carlos Van Rankin, presionado por la falta de renovación de contrato, dos veces puso en aprietos a Fabian Villaseñor. Primero con un cabezazo que resolvió el sustituto de Christian Campestrini y luego con un disparo, que apenas se fue por un costado de la portería de La Franja.
La atención estaba en el otro lado de la portería. Se esperaba que Nicolás Castillo, héroe en otras tardes, por lo menos tuviera la capacidad de anotar un gol, para regalar algo a la afición universitaria. La única posibilidad que tuvo fue al minuto 73, cuando Matías Britos corrió hasta la línea de fondo y mandó un centro al área chica. El esférico se paseó y parecía llegar a la posición del chileno, pero un defensa alcanzó a rozar la pelota y evitó que el atacante Puma festejara su noveno gol en el torneo.
Sin nada que festejar, en la grada se empezó escuchar el “Olé, olé, Verón. Olé, olé, olé, Verón”, el capitán que se niega a retirarse y en Pumas dudan en renovar su contrato, que vence en el verano. Los universitarios se despiden del torneo en el penúltimo lugar de la tabla, con seis partidos consecutivos sin ganar, cinco de ellos derrotas y sólo un empate.