Morelia, Michoacán.- Lograr un modelo sustentable que proteja al medio ambiente y resguarde los derechos de los productores, es una de las metas de la Confederación Nacional de Productores Rurales (CNPR), por lo que en reiteradas ocasiones el titular de la organización, Eduardo Orihuela Estefan ha intercambiado puntos de vista y buscado reuniones con los titulares de las dependencias federales encargadas de salvaguardar los recursos naturales de México.
La CNPR incluso, está próxima a reunirse con el titular de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), Guillermo Haro Bélchez, para tratar los temas relacionas a la legalidad en huertas aguacateras y el cuidado de las zonas de vocación forestal; ello, luego de la ola de desacreditaciones que se han registrado en los últimos meses debido a los operativos que la Secretaría de Medio Ambiente, Recursos Naturales y Cambio Climático (Semarnacc) ha implementado en Michoacán.
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Y es que la CNPR ha contabilizado por lo menos un millón de plantas de aguacate cortadas, lo que asciende a pérdidas por más de 100 millones de pesos en predios que han tenido vocación productiva desde hace más de 20 años y que han sido taladas por la Semarnacc, con la justificación de que son plantíos “ilegales”; incluso, después del resolutivo de Profepa en el que señala que dichos operativos están fuera de la ley.
Al respecto, Orihuela Estefan tiene una serie de propuestas específicas para equilibrar la situación ambiental en Michoacán, en el entendido de que los productores del campo son los menos beneficiados con el cambio climático. Y primeramente lo que exige y propone la CNPR en un “respeto irrestricto” a la Ley.
“Michoacán tienen una crisis en la aplicación del Estado de Derecho, ya sea por omisión o por interés, pero lo que ha pasado en los últimos días (desmantelamiento de huertas de aguacate) ha dañado también al medio ambiente. Nosotros en la CNPR promoveremos que se sancione a quien se deba sancionar y que el gobierno michoacano primero respete la ley si quiere que esta sea respetada y se restituyan los bosques que fueron los que realmente se afectaron en días pasados y se restituya a los productores también afectados”, apuntó Eduardo Orihuela.
En segundo lugar, el joven empresario ya hizo una solicitud a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y a la Profepa, para construir en coordinación una serie de programas que apoyen al resguardo de los bosques, herramientas económicas para su cuidado y que no resulten las propuestas únicamente en demagogia y con los productores, ver cómo se retribuyen las zonas para tener actividades primarias sustentables que favorezcan a los michoacanos.
En tercer lugar, el presidente de la CNPR llamó a no permitir que se criminalice al productor como se hizo a partir de los operativos implementados por Semarnacc, pues a consecuencia de ello el propio cultivo del aguacate se ha “criminalizado”. Aun con ello, demostró que Michoacán continúa por séptimo año consecutivo como puntero en el valor de la producción agrícola; además con un millón 100 mil hectáreas cultivadas en los que se siembran más 119 productos y que generan más de 40 mil millones de pesos en cuanto a economía.