El embarazo en la adolescencia ya es problema de salud pública en Michoacán, reconoció este día el gobernador Silvano Aureoles, quien dijo que no está mal que los jóvenes tengan una vida sexual activa siempre y cuando esta sea responsable.
Es al menos la sexta ocasión que el mandatario michoacano reconoce que hay una elevación “muy fuerte” de embarazos en adolescentes. Lo hizo por primera ocasión en la comunidad terracalenteña de Pinzándaro, perteneciente a Buenavista Tomatlán, y hoy lo reiteró más fuerte y claro, por la mañana ante cientos de jóvenes en Casa de Gobierno donde entregó becas para estudiantes del Conalep y apoyos del programa Capacítate para los jóvenes que deseen ingresar a alguno de los programas de capacitación para el trabajo que tiene el ICATMI.
Más tarde en Cotija municipio que colinda con el estado de Jalisco, el gobernador retomó el tema al decir que “traemos un problema de salud pública con el embarazo adolescente” que si bien recibir a un hijo es una “bendición” según calificó por la mañana, “no es compatible con el estudio o el trabajo porque demanda un mayor sacrificio”, abundó por la tarde.
“En Pinzándaro entregamos una cuna a una niña de 14 años, mi pregunta fue ¡¿es pa ti o pal’ que viene?!”, recordó Aureoles Conejo.
En esta misma comunidad y también hoy por la mañana, el gobernador Aureoles, comentó que en Apatzingán hay una comunidad donde el 50% de los jóvenes son adictos a drogas sintéticas de acuerdo a un estudio preliminar que fue realizado, lo que aprovecha la delincuencia organizada que los “usa, explota y luego deshecha”.
En Casa de Gobierno el mandatario dijo que la prioridad central de su gobierno son los jóvenes, “pues en manos de ustedes vamos a dejar nuestro estado, el presente y el futuro de los que aquí vivimos”, remató.
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