El príncipe Enrique, duque de Sussex, también llamado popularmente Harry no se detiene en hacer revelaciones controvertidas
Ahora durante una conversación en la emisión 60 minutos, el príncipe Enrique reconoció que hasta antes de conocer a su actual pareja, Meghan Markle, él era racista, situación que con el paso de la relación cambió, pues su esposa tiene orígenes afroamericanos.
Aunado a esta confesión, el hijo menor de Lady Di dijo que los medios de comunicación ingleses, pese a su aparente neutralidad, también encierran una gran carga xenófoba.
“No tenía idea de que la prensa británica fuera tan intolerante. Demonios, probablemente yo era intolerante y racista antes de mi relación con Meghan”, afirmó.
Esta declaración se suma a la que el Duque de Sussex ha hecho en otro momento, cuando afirmó que las mujeres, salvo la fallecida Reina Isabel, tenían muy poco que decir o no eran escuchadas en un ambiente dominado por los hombres.
Este prejuicio, más el racismo, colocó a Meghan en una disyuntiva difícil de sobrellevar por la combinación de la forma cerrada del pensamiento real.
“Ponlo de esta manera. No vi lo que veo ahora”, dijo Henry, refiriéndose a lo complicado que fue para su pareja pasar por esta experiencia.
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Otras de las polémicas confesiones que ha realizado el príncipe Enrique fue que tuvo una pelea a golpes con su hermano Guillermo, que consumió cocaína y que en su paso por el ejército británico durante la guerra en Afganistán cobró la vida de 25 talibanes.