Conoce los síntomas y cómo prevenir el cáncer de estómago.
La incidencia del cáncer de estómago ha visto una disminución anual en Estados Unidos, pero ha aumentado su presencia entre la población joven. Anaum Maqsood, especialista en oncología gastrointestinal, alerta sobre la creciente aparición de esta enfermedad en pacientes jóvenes y su rápida tasa de incidencia comparada con otros cánceres de inicio temprano.
A nivel mundial, se registran aproximadamente 27 mil casos nuevos de cáncer gástrico cada año, con más de 11 mil fallecimientos relacionados.
La detección de síntomas gastrointestinales y el conocimiento de los factores de riesgo son cruciales para combatir el cáncer de estómago, según destaca Maqsood.
Un estudio del Houston Methodist Hospital sugiere que el aumento de cáncer gástrico podría vincularse a hábitos sociales actuales, como el consumo excesivo de alimentos procesados y el sedentarismo, así como a un acceso limitado a frutas y verduras frescas.
Síntomas del Cáncer de Estómago
Maqsood comparte valiosa información sobre los síntomas y factores de riesgo, enfatizando la importancia de la detección temprana.
Los síntomas iniciales del cáncer de estómago son escasos, pero signos como hinchazón postprandial, sangre en heces, diarrea, indigestión, pérdida de apetito, náuseas, vómitos, dolor abdominal, sensación de comida atorada en la garganta y debilidad pueden ser indicativos.
Maqsood aconseja consultar a un especialista ante la presencia de varios síntomas para diferenciar entre un diagnóstico oportuno y una enfermedad grave.
Muchos factores de riesgo del cáncer gástrico son modificables con ayuda médica, incluyendo el consumo de alimentos salados, ahumados y ricos en nitratos, así como el uso de alcohol y tabaco.
Sin embargo, hay factores como la genética y ciertas infecciones, como la causada por Helicobacter pylori, que están fuera del control del paciente y pueden influir en el desarrollo del cáncer.
Maqsood aclara que, aunque no existe una prueba de detección general para el cáncer de estómago, los individuos con factores de riesgo pueden beneficiarse de métodos de detección específicos.
La prevención es posible mediante la evaluación de riesgos, la mejora de la nutrición y hábitos alimenticios, exámenes genéticos y una vigilancia médica constante.