Morelia, Michoacán.- “Estamos viviendo… estamos en camino hacia la gran guerra mundial por el agua”, expresó el arzobispo de la Arquidiócesis de Morelia, Carlos Garfias Merlos, quien citó al Papa Francisco al señalar que el derecho al agua es fundamental para la paz, pues en la “tercera guerra mundial a pedacitos” se debe concientizar el derecho humano al líquido vital y centrar las políticas públicas en su cuidado.
Lo anterior, en el marco del Día Mundial del Agua, que se conmemora el próximo 22 de marzo. Ahí, insistió en las palabras del “Sumo Pontífice”, al referirse que Francisco ya habló y advirtió sobre el tema y los conflictos humanos que se registran en algunas regiones del mundo, donde el agua es el centro de la problemática.
“Si no se logran tener medidas adecuadas para el cuidado del agua y para tener los acuerdos convenientes entre los distintos habitantes de las regiones del mundo, el agua puede ser un problema serio y puede provocar un conflicto mundial internacional, ciertamente creo que es lo que se ha venido expresando en diferentes formas”, precisó Garfias Merlos.
Además, hizo hincapié en que los recursos hídricos y la gama de servicios que prestan juegan un papel clave en la reducción de la pobreza, el crecimiento económico y la sustentabilidad ambiental. Toda vez que el vital líquido genera un impacto positivo en la vida de miles de millones de personas al incidir en situaciones como la seguridad alimentaria, la energética, la propia humana y la del medio ambiente.
“Es importante que en el marco de esta celebración todos tomemos conciencia para superar los desafíos que plantea el agua en el Siglo XXI. Los problemas medioambientales junto con el cambio climático, provocan las crisis asociadas a los recursos hídricos que ocurren en todo el mundo, las inundaciones, las sequías y la contaminación del agua se agravan con la degradación de la cubierta vegetal de los suelos, los ríos y los lagos. Y somos nosotros quienes dificultamos el acceso a esos recursos imprescindibles para sobrevivir”, abundó el sacerdote.
Además, hizo un llamado a toda la sociedad para que se haga un compromiso fuerte y se dé al agua el “puesto” que le corresponde en la vida diaria, que desde la infancia se aprenda la cultura del cuidado del vital líquido y se fomenten causas en las que se unan para cuidar el agua que dijo, es fundamental para que haya vida.