El Tribunal Electoral ratifica el Plan C, asegurando mayoría para Morena y aliados.
El Tribunal Electoral ha ratificado de manera definitiva el ‘Plan C’ en la Cámara de Diputados. La única oposición fue de la magistrada Janine Otálora, manteniendo así la distribución de escaños que permite a la coalición Morena-PT-PVEM aprobar reformas rápidamente en San Lázaro.
Actualmente, el Tribunal Electoral sigue en sesión para decidir sobre la composición del Senado y las impugnaciones a asignaciones específicas de figuras como Ricardo Anaya, Lilly Téllez y Javier Corral, además de temas como la afiliación efectiva y las acciones afirmativas.
Impugnaciones Presentadas por la Oposición
Las impugnaciones presentadas por la oposición fueron manejadas por el magistrado Felipe de la Mata Pizaña, quien optó por mantener las leyes actuales, argumentando que cambiar las reglas después de finalizada la jornada electoral sería “una franca afectación a la certeza jurídica”.
“Buscan cambiar las reglas del juego una vez que éste ya se jugó y que tuvo resultados que a algunos jugadores no les gustó. Si se quiere cambiar el contenido de la regla es necesario legislar, mientras eso no ocurra, se debe mantener la norma vigente”, declaró de la Mata Pizaña.
Por otro lado, el magistrado Reyes Rodríguez Mondragón, quien no pertenece al bloque mayoritario, también expresó que las reglas no deben modificarse una vez que han sido aprobadas y anunciadas, basándose en ellas para el proceso electoral.
A pesar de votar a favor, se opuso a una parte del proyecto, manifestando que “No puedo darle la razón a las propuestas de las demandas que impliquen alterar las reglas del juego una vez que éste terminó. Ni por las buenas intenciones de evitar regresiones ni por reformas reprochables como ampliar los mandatos de las y los juzgadores que deciden sobre este caos”.
La magistrada Janine Otálora fue la única en oponerse, señalando que los partidos, a través de sus convenios de coalición, estaban distorsionando la distribución de las plurinominales, otorgando escaños a partidos minoritarios que no los habían ganado en votaciones.
Ejemplificó que aunque la coalición de Morena-PT-PVEM asignó a Morena 145 diputaciones, al PVEM 40, y al PT 34, los votos reales favorecieron a Morena con 213, al PVEM con seis y al PT con ninguno, indicando que los verdaderos triunfos corresponden a Morena y no a sus aliados.
Mónica Soto, la magistrada presidenta, mostró con gráficas cómo en cada elección federal, la distribución de representación varía según los votos en las urnas y cómo todos los partidos se han beneficiado de la misma fórmula.
“Es una falacia, es decir, una mentira, que el voto esté fragmentado, que no valga lo mismo para cada ciudadano, eso no es correcto decirlo, un voto, un ciudadano y una ciudadana, ¿por qué se distorsiona? Porque depende de lo que la ciudadanía decida en mayoría relativa, se aplica la fórmula, la misma en todas las elecciones para designar cuánto le toca a cada partido político y con las mismas normas y con la misma interpretación, va variando”.
Afirmó que “la ciudadanía ya decidió y el voto ya se depositó en las urnas”, por lo que la Sala Superior no puede ir en contra o modificar las reglas en el proceso electoral actual.