La certidumbre de las becas que el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) le otorga a los estudiantes de la Universidad Michoacana no se encuentra en riesgo, pese a que la máxima casa de estudios permanece paralizada por integrantes del Movimiento de Aspirantes y Rechazados (MAR).
A 53 días de que arrancó la toma en diferentes planteles de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH), la directora Regional del Conacyt Teresa Ramírez descartó que los programas que coordina este organismo se pudiesen llegar a ver afectados, pues resaltó que “los problemas internos se deben de manejar de manera interna, el Conacyt como cualquier programa federal y hasta estatal no se ve influido en esto”.
Como contexto, dijo que el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología cuenta con cerca de 30 programas de posgrado, repartidos entre maestría y doctorado, mismos que, según su argumento, no se pondrán en riesgo a consecuencia de la toma que prevalece en la Casa Hidalgo.
“El apoyo de Conacyt es hacia los estudiantes para poder garantizar la matrícula de estos programas, y depende del grado hay un tabulador para maestría, que es de seis salarios mínimos y de ocho para doctorado”, aseveró al ser abordada sobre el recurso que se destina a cada uno de los programas ofertados.
Pese a resaltar que no se alterará el rumbo financiero de los programas que dependen del Conacyt, subrayó que los cerca de 300 estudiantes inscritos podrían verse afectados en cuanto al desarrollo de sus proyectos.
“Muchas veces los jóvenes se ven forzados a cumplir con sus trabajados de manera externa, porque sus proyectos de investigación cuentan con tiempos específicos de por medio”, externó.
En torno a la toma, Teresa Ramírez dijo que el Conacyt se mantendrá al margen de esta situación, pero se dijo confiada de que la Universidad Michoacana conseguirá salir avante de la problemática que impera en su operatividad.
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