Fue desde Federación en donde se ordenó la suspensión del proceso de evaluación a los docentes el fin de semana pasado; esto ante la escasa participación de los maestros en la convocatoria pasada, pues trascendió que asistieron 20 profesores, de acuerdo con el secretario de gobierno del estado de Michoacán, Adrián López Solís.
En entrevista colectiva, López Solís manifestó que la autoridad federal en coordinación con la estatal en materia de educación es la encargada de fijar fechas y lugares de las evaluaciones, por lo que le restó responsabilidad al estado y dejó todo en su mayoría al gobierno federal.
El encargado de la política interna de Michoacán señaló que lo que ha acontecido con las evaluaciones no es un tema de operación política, sino de cumplir con la ley, “quienes son sujetos a ser evaluados y no responden a la convocatoria, en todo caso en esa actitud llevarán el reconocimiento a las consecuencias por la omisión de su obligación”.
Al cuestionarle sobre las consecuencias que pueden atraer quienes no asistieron a su evaluación, el secretario de gobierno contestó que serán las autoridades competentes en materia educativa las que respondan a dicha situación; sin embargo, hasta el momento es incierto el futuro de los faltistas.