Han trascurrido ya tan solo unos días de que las redes sociales fueron invadidas de imágenes de las nuevas administraciones municipales, diputados locales y federales así como senadores, tomaran protesta ante sus nuevas encomiendas como representantes constitucionales de miles de ciudadanos que albergaron la esperanza de mejorar su entorno.
Hoy han sido pocos los políticos que se han percatado de la importancia que tienen los medios digitales, ya que ahora cada propuesta de campaña ha sido capturada, guardada, comentada y hasta compartida entre miles de ciudadanos que navegan en internet.
Los primeros días de gobierno son fundamentales para la percepción que tendrá la ciudadanía sobre las nuevas administraciones, poniendo a prueba la gran frase que dice “Los que bien empieza, bien acaba”. Pocos, son los políticos preocupados por el contenido de sus publicaciones, por cuidar en no generar solo basura visual.
Hoy vivimos nuevos tiempos, donde se documentan cada paso que dan los políticos y que es la misma ciudadanía quienes en redes sociales alzan la voz sobre lo que se está haciendo y son ellos quienes someten a tela de juicio las acciones, por tal motivo es necesario cuidar lo que se dice pero más aun lo que se hace.
El sociólogo español, Manuel Castells menciona que las protestas en redes sociales son un fenómeno mundial que surgen de la indignación y el coraje de la gente y que pone en peligro los fundamentos de la democracia, y que es necesario reinventar la política, ya que no está cumpliendo con las necesidades básicas de la población, pero si sirve a sí misma.
La política de hoy es digital, es más visual y es que aun que exista miles de personas que aun vivan en una marginación y pobreza, hay otros tantos que tienen acceso a teléfonos móviles o computadoras con acceso a internet y que diariamente leen cientos de publicaciones sobre las tareas que emprenden los nuevos funcionarios públicos.
Es necesario cuidar también el hacer una política de campo en un escenario real ya que desafortunadamente las personas que realmente ocupan políticas públicas para mejorar sus condiciones de vida ni siquiera tiene acceso a lo virtual.
Hay que tener muy en cuenta que la tecnología ha marcado una nueva tendencia de hacer política y es que ahora ya no se pueden dejar por un lado la mala actuación de los servidores públicos, ahora se exhiben, se comentan, es la propia ciudadanía quien determina que se debe de hacer ante ciertas situaciones.
Por eso es necesario no demeritar el poder que tiene la tecnología para construir o destruir una carrera política.
La tecnología ¿Una herramienta o un arma?