Morelia, Michoacán.-Tras jugar el quinto partido de la serie de otoño y último en el campo de los Astros de Houston, los de casa lograron el triunfo en un muy emocionante encuentro ante Dodgers de Los Ángeles.
Un partido que hizo vivir al borde del infarto por las emociones dadas en un juego que fue desde el principio un encuentro lleno de carreras, pues los Dodgers en la primera entrada se pusieron al frente.
Consiguieron cuatro carreras que hicieron callar a miles de aficionados de Houston, pues su pitcher abridor Keuchel fue apaleado, pero nunca bajaron los brazos y en la cuarta entrada lograron emparejar el marcador para después los angelinos volver a ponerse al frente por tres carreras.
Houston no permitió que los Dodgers llevaran un partido a modo pues en la séptima entrada los hombres de Astros llegaron en su turno al bat para darle la voltereta a un encuentro que hoy deja en evidencia al mal pitcheo de ambas escuadras.
Por los Astros salió a la loma Keuchel y por parte de los Dodgers Kersham, quienes se tuvieron que retirar del montículo después de ser ambos apaleados.
Pero las emociones no pararon porque los angelinos empataron en la novena entrada estando a un strike de que los de casa se levantaran con el triunfo.
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— Houston Astros (@astros) 30 de octubre de 2017
Los visitantes produjeron una carrera para poner el marcador a 12 carreras para cada uno, lo que los obligó a irse a extra innings y desbordar los nervios para los miles de aficionados que ya veían a su equipo ganador.
Los Ángeles fueron los primeros en abrir los tiempos extras y son sacados por el pitcher relevista dando paso a los astros que en su turno al bat y luego de dos outs, llegó el turno de Bergman quien con un tablazo produce la carrera del triunfo, que le dio un marcador final de 13 carreras contra 12.
Con ello, Astros está a un juego de conseguir el campeonato mundial de béisbol.
Así terminó un juego que duró más de cinco horas cargadas de emociones. Hay que esperar al martes para el desarrollo del sexto encuentro, el lunes viajan al estadio de Los Ángeles, donde se jugarán los dos partidos restantes siempre y cuando logren empatar con los Dogers en su casa y así obligar a jugar el séptimo y último encuentro