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Tras el cese de Pablo Marini como entrenador de Monarcas Morelia, la sacudida  ha sido tremenda y en las huestes del campamento michoacano el enfermo sigue en terapia intensiva. Pero el ecuatoriano Gabriel Achiller, sale al frente por su equipo que pese al amargo torneo que los tiene en el inminente descenso le pone el pecho a las balas: “No estamos rendidos, al contrario, estamos mucho más fuertes que nunca”, aseguró.

El zaguero sudamericano este miércoles fue hablar con la prensa para señalar que pese al huracán tras la salida de Pablo Marini, siguen de pie, firmes y con el objetivo de salvar al equipo a como dé lugar.

“Realmente es una situación un poco desfavorable por las aspiraciones que tenemos y sin duda que quedarnos sin técnico a estas alturas resulta un poco complicado, pero creo que uno lo tiene que asumir como tal, nosotros a la interna estamos conscientes de la responsabilidad que tenemos y esto lo vamos a levantar nosotros mismos, no depende de nadie más, sino de nosotros a eso venimos, para eso estamos y esperamos cumplir con ese objetivo que nos hemos trazado como grupo. Ojalá que Dios nos permita darle más alegrías a esta ciudad que se lo merece” aseguró Achilier con rostro seguro y serio.

El zaguero quien apenas en el partido anterior debutó con los michoacanos, dijo que tiene la experiencia de jugar partidos por el no descenso y mandó el mensaje:

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“Yo en lo particular jugué un descenso. El descenso se juega de otra manera y creo que hoy por hoy lo que este cuadro quiere es no perder la identidad, el técnico anterior quería tratar de mantener el buen juego y ser protagonistas y era un poco complicado pero ahora todos sabemos que hay que jugar con el cuchillo entre los dientes, que cada partido es a morir y de ahí en más los resultados se irán dando”.

Claro, conciso y sin excusas, expresó que: “El técnico que llegue a tomar las riendas de este barco debe de saber que acá tiene jugadores para llevarlo a puerto seguro y para que el barco llegue a lugares estelares porque se lo merece, es un gran equipo, una gran familia, la directiva ha hecho un gran esfuerzo porque todos estemos contentos acá y sabemos que hay mucho prestigio y reputación en juego y no podemos dejar de luchar y sumar todos para que esto llegue a donde queremos llegar”.

Pese a que las aguas siguen agitadas y más vivas que nunca por la grave problemática del inminente descenso, Achiler no pierde la fe de triunfar con Morelia y en el futbol mexicano.

“Estoy motivado porque era mi sueño estar acá, jugar, salir de mi país, seguir creciendo futbolísticamente, aún tengo el anhelo de un mundial,  me motiva hacerlo, era el sueño de mi familia, estoy muy motivado y quiero ser recíproco con el cariño y el respaldo que todos me han dado y vengo con muchas ganas y esperando mi oportunidad como todos y tratando de sumar lo más que pueda”.