Morelia, Michoacán.- Hasta ahora, la Comisión Nacional de Ética, del Partido Revolucionario Institucional (PRI), no ha recibido ningún caso de militantes que hayan sido señalados por falta de ética, argumentó el presidente de esa comisión, José Antonio González Fernández, ante medios de comunicación.
En ese tenor, aclaró que todos los casos y/o señalamientos contra priistas que se registraron antes de la creación de la comisión (en noviembre de 2017), están en proceso en la Comisión Nacional de Justicia Partidaria, por lo que no son de su competencia específicamente en el tema de Michoacán, casos como el del ex gobernador, Fausto Vallejo Figueroa.
De igual manera, en el tema de Juan Antonio Ixtláhuac Orihuela, candidato a senador y que supuestamente tiene una “inhabilitación” por parte de la Auditoría Superior de Michoacán, González Fernández, refirió que en el caso de que así sea, la sanción que tendría el priista, sería para contender por un puesto estatal, sin embargo, declaró que Ixtláhuac Orihuela reunió todos los requisitos que el PRI requiere y el cargo público por el que contiende, es federal.
En ese tenor, el presidente de la Comisión Nacional de Ética, reiteró que por el momento no se ha recibido ningún caso de militantes con señalamientos por falta de ética; pero informó que sí han recibido muchas solicitudes de “reafiliaciación”, a quienes como único requisito se les pide que no hayan sido expulsados. “El priista que es expulsado no puede volver a regresar”; para el resto, se abre un proceso y después se define su situación.
Es importante hacer mención que el propio José Antonio González, expuso que la Comisión Nacional de Ética, se creó a partir de la percepción de los mexicanos de que el PRI es un partido corrupto. Y a través de esta figura pretenden que dichos señalamientos no continúen. “Sentimos en ese contexto que teníamos que hacer notar que el PRI tenía que reforzar sus valores, principios, maneras de actuar, de seleccionar a candidatos y crear una conciencia de que nosotros queremos lo mejor para el país”.
En el caso de que algún militante sea señalado ante la Comisión, se abrirá un proceso para determinar la sanción que se le impondría a dicho personaje; además se pudiera canalizar el proceso a la Comisión Nacional de Justicia Partidaria, si así fuera el caso (en temas propiamente delictivos)