Especialistas de EU exploran la interacción entre el narcotráfico y el cultivo de aguacate en México.
Ciudad de México.-Un estudio difundido por Social Science Research Network (SSRN) revela que la competencia en el narcotráfico de opioides ha despertado interés en el cultivo de aguacate entre los cárteles en México.
La crisis del fentanilo en Estados Unidos puso de manifiesto las consecuencias del narcotráfico en la agricultura, especialmente para los cárteles impactados por la fluctuante demanda de heroína y fentanilo.
Impacto del narcotráfico en los cultivos de aguacate
La presunta relación del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador con el narcotráfico, mencionada en la campaña de 2006, puso a México en el centro de las actividades económicas influenciadas por los cárteles.
Los productores de aguacate, particularmente afectados por la volatilidad del mercado de la heroína y el fentanilo desde 2011 hasta 2023, han sido objeto de estudio por parte de investigadores y autoridades de Estados Unidos.
Itzel De Haro López, del Department of Agricultural and Applied Economics, señaló en la investigación de SSRN que los grupos delictivos se inclinaron por el aguacate debido a su lucrativo mercado de exportación.
Haro López destacó que ciertos municipios experimentaron pérdidas de hasta 250 millones de dólares debido a extorsiones y violencia contra los agricultores.
Agricultores de Uruapan, en conversaciones con medios estadounidenses, relataron cómo la caída de los precios del opio entre 2017 y 2018 trajo consigo un aumento en la violencia vinculada al comercio agrícola.
Los desafíos de los agricultores mexicanos ante el narcotráfico
Antes del auge del fentanilo, los productores mexicanos ya enfrentaban retos por el narcotráfico. En 2011, un estudio de la Universidad Autónoma Metropolitana de Iztapalapa reveló que la militarización y el cultivo de amapola y cannabis desplazaron a los cultivadores de frijol y maíz en Michoacán.
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Salvador Maldonado Aranda, en su trabajo reconocido con el sexto Premio Iberoamericano en Ciencias Sociales, describió cómo las comunidades agrícolas lidiaron con la violencia desde diversos frentes, afectando tanto a desplazados por la violencia como a familias involucradas en la siembra de drogas.
Por otro lado, Insight Crime en 2022, informó sobre cómo la rivalidad entre cárteles afectó al cultivo de limón, imponiendo precios y extorsiones a los productores en Michoacán y Jalisco.
Este análisis pone en evidencia la compleja relación entre el narcotráfico y la agricultura en México, donde el cultivo de aguacate se ha convertido en un nuevo frente en la lucha por el control territorial y económico.