Morelia, Michoacán.- El narcotráfico y la violencia debilitan al Estado Mexicano y corroen las instituciones, opinó el ex director del diario El País, Javier Moreno Barber, cuestionado sobre la inseguridad que prevale en el país y en Michoacán.
En entrevista, el periodista español rechazó que México se haya convertido en un Narco-Estado, pero admitió que la inseguridad y la violencia que se mantiene en el país, han debilitado y corroído a las instituciones.
“Narco-Estado es cuando realmente se dedica a organizar, a promover, a fomentar y no solo a proteger el narcotráfico; otra cosa es que realmente el narcotráfico está debilitando, está corroyendo las instituciones, como sucede en Colombia, como sucede en muchos sitios, eso es una cosa, y otra cosa es Narco-Estado y México no es uno”, dijo.
Sin embargo, reconoció que la violencia que se percibe en el país, “es terrible”, pues expresó, “creo que el riesgo que está sufriendo el conjunto de la vida pública, el conjunto de las instituciones y el conjunto de la democracia en México por la violencia de los narcotraficantes es terrible”.
No obstante, aclaró que en México no se ha llegado al nivel de violencia visto en países como Colombia, por lo que pronunció su confianza en que las autoridades gubernamentales de México lograrán abatir la delincuencia antes de llegar a escenarios como los vividos en el país sudamericano.
“Siempre le digo a mis amigos mexicanos que miren Colombia, hubo una época en el que el narcotráfico hacia explotar aviones comerciales, ponía bombas que mataban a cientos de personas en el centro de Bogotá, volar sedes de periódicos con explosivos, México no ha llegado a eso, pero Colombia fue capaz de recuperar el terreno cedidos y de ir recuperando para el Estado territorios que había abandonado; México yo creo que nunca ha estado tal mal como lo estuvo Colombia en algunos momentos y yo tengo fe en que será capaz de derrotar a la violencia”, comentó.
Moreno Barber explicó que las acciones de la autoridad federal no se replican en los estados del país, lo que ha provocado que la situación de violencia se radicalice en algunos estados de la nación, como el caso de Michoacán.
“Algunas cosas funcionan a nivel federal, pero no hacen a nivel estatal, y esto es una dicotomía clara, creo que las instituciones que conforman el Estado Democrático, funcionan peor o no funcionan en los estados”, explicó.
Y añadió que aunque la autoridad estatal luche por abatir la imagen de inseguridad de Michoacán, los sucesos de violencia no pasan desapercibidos. “Los sigue siendo, y yo entiendo la preocupación por la imagen, y entiendo la preocupación de no querer transmitir lo que son siempre sucesos aislados de que es un territorio fuera de la ley o sin control alguno, no es así, pero tampoco son casos puntuales, hay una sucesión, un goteo permanente que convierte esto en un patrón de conducta que es inaceptable y que el gobierno federal defería tomar cartas en el asunto”, concluyó.