En cuanto a gasto por diputado, el de Michoacán es el segundo Congreso más caro del país
Morelia, Michoacán.- Con un presupuesto superior a los 900 millones de pesos, el de Michoacán es el tercer Congreso más caro de todo México, solo después de la Ciudad de México (en primer lugar) con un monto mayor a los mil 700 millones de pesos y el Estado de México (en segundo lugar) con mil 281 millones de pesos.
El de Michoacán es de poco menos de mil millones de pesos, aunque originalmente estaba contemplado para rebasar esa cantidad con mil 23 millones de pesos, al que la LXXIII Legislatura, le restó cien millones de pesos para que fuera un presupuesto “austero”.
Según datos del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), los diputados costaron al país 14 mil 57 millones 261 mil 419 pesos en 2019, cifra que asegura, es mayor a lo presupuestado por todas las entidades del país en temas de transparencia, derechos humanos, partidos políticos, organización electora y justicia electoral.
El estudio realizado por el IMCO, también detalla que en cuanto al gasto por diputado, el de Michoacán se ubica en segundo lugar a nivel nacional también por debajo de la Ciudad de México, es decir, cada diputado le cuesta a Michoacán, más de lo que costó un diputado federal en el año 2018, con una cifra superior a los 25 millones de pesos.
A nivel general, el estudio revela que México gasta más en sus diputados locales que lo que se gasta en un país Europeo como España, haciendo la comparativa en millones de dólares, el presupuesto total de los 32 Congresos en el país es superior a los mil 505 millones de dólares, mientras que en España es de 583 millones de dólares.
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El informe del IMCO, pone el “dedo en la llaga”, al señalar que las grandes cantidades de dinero que se gasta en los diputados mexicanos, no corresponde al poco trabajo legislativo que realizan; pues deja claro que las funciones primordiales de los Congresos son las de presentar y aprobar leyes, vigilar a otros poderes, ratificar nombramientos e iniciar juicios políticos, entre otras.
Pero destaca que los congresos locales se han dedicado a invadir funciones como las de apoyos sociales, que no corresponden a un legislador: “Las ayudas sociales son asignaciones que las instituciones públicas otorgan a personas e instituciones. En 2018, 25 congresos locales gastaron discrecionalmente y sin reglas de operación mil 852 millones de pesos en este concepto”.
“Los diputados no tienen la función legal de dar ayudas sociales”
Ante la situación, el IMCO propone a los legisladores mexicanos: construir congresos austeros, Apegarse a sus funciones y eliminar el gasto en ayudas sociales y planear mejor su presupuesto y no gastar más de lo planeado.