La temporada 2020-21 podría ser la última de Lionel Messi con la camiseta del Fc Barcelona, el club que le dio la oportunidad de dar el gran salto al fútbol mundial.
Morelia, Mich.- El astro argentino, que llegó a la capital catalana en el verano del año 2000, lleva ya 20 años en la Ciudad Condal y no había contemplado nunca irse del club blaugrana hasta el verano pasado, cuando amenazó con irse por problemas con la directiva actual. Sin embargo, tras pensárselo bien, el número 10 argentino decidió quedarse por no querer llevar a juicio a la entidad a la que le debía todo y con la que se sentía muy identificado.
Su decisión ha entonces drásticamente cambiado la dinámica de los blaugrana en esta temporada, con el nuevo entrenador Ronad Koeman como encargado de llevar a cabo una revolución táctica en la que, obviamente, el argentino será el capitán y el referente total del juego.
Por estas razones, Messi va a querer luchar por todos los títulos posibles, pese a que el Barça no sea el favorito en los pronósticos de la Champions, competición en la que el Bayern Munich y el Manchester City son los grandes candidatos. El buen arranque en esta competición, pese a todo, ha visto el Barcelona imponerse por goleada al equipo húngaro del Ferencvaros, que no ha tenido prácticamente opciones en el Camp Nou en el primer partido de la fase de grupos. Si bien sea pronto para poder dibujar una hoja de ruta a largo plazo, el equipo catalán sabe qué quiere decir competir en este torneo, una competición en la que ha llegado hasta el fondo en cuatro ocasiones en los últimos 16 años. Con la garantía de poder disponer de un jugador como el argentino, que hace que el equipo pueda rendir mejor y destaca por ser siempre muy concreto contra las porterías rivales, el Barça intentará dar la sorpresa en la Champions.
No se podrá decir lo mismo en la Liga, campeonato en el que los hombres de Koeman son los candidatos a la victoria final según las apuestas online, pese a la derrota sufrida últimamente por el Getafe en el Coliseo Alfonso Pérez.
De hecho, la gran virtud de Messi ha sido siempre la de querer ganarlo todo y en cualquier momento. No es extraño que, después de haber afirmado que se quedaría en el Barça el 10 argentino se haya mostrado muy lúcido y haya dado prueba de estar muy bien físicamente. Esta temporada, sin embargo, el sudamericano tendrá que luchar para muchos objetivos sin su gran amigo y compañero de ataque Luis Suárez, que se ha marchado al Atlético Madrid, aunque podrá hacer hincapié en dos jóvenes con mucho potencial como Ansu Fati y Pedri, que ya apuntan maneras y serán seguramente algunos de los jugadores más destacados de la campaña actual del club blaugrana. La que podría ser la última temporada de Messi en el Camp Nou, pinta como muy espectacular.
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