Por: Gerardo A. Herrera Pérez
Este fin de semana tuve la oportunidad de estar en la cabecera municipal de Maravatio; estuve también en la Tenencia de San Miguel Curaguango.
El objeto de mi presencia fue hacer el acompañamiento de jóvenes quienes están construyendo conciencia verde, y cuyo propósito me anima cuando escucho el defender la posición de la naturaleza y sus derechos, defender la diversidad biológica, pero también evitar más presión sobre el medio ambiente.
En San Miguel Curaguango, me encontré con diversos jóvenes que realizan la reforestación de las canchas de futbol; la idea, por demás importante, es crear cortinas verdes que detengan las tolvaneras en tiempos de secas, toda vez que las mismas dañan las vías respiratorias de los habitantes de dicha comunidad y de los jugadores que utilizan éstas.
Me interesó como los jóvenes construyen y diseñan sus propias estrategias de reforestación; ellos, decidieron reforestar de manera alternativa con pino michoacano, como con árboles frutales, fresnos y maples. El ejercicio social que se hizo para establecer las cortinas verdes, deriva de un solo objetivo darle viabilidad al Día Internacional de los Jóvenes, asumiendo un compromiso de conciencia verde.
Estoy seguro que en Maravatio desde hace apenas pocos años se observa un mayor compromiso de conciencia ambiental con respeto de años anteriores, en donde ha prevalecido la erosión de los suelos principalmente, estas acciones de conciencia verde las han emprendido en la educación básica y hoy un conjunto de ciudadanos jóvenes está saliendo a reforestar y a fortalecer los mecanismos para evitar la deforestación y mejorar la calidad de aire y de vida de la biodiversidad.
En México, como en Michoacán, es necesario promover acciones que concilien el desarrollo sustentable con el crecimiento del País y lo es porque tenemos que cuidar la biodiversidad.
Los jóvenes que tuve la oportunidad de apreciar, este 12 de agosto, son jóvenes que pronto harán proyectos de familia, con ellos, tenemos que insistir en que se den la oportunidad de hacer lecturas sobre el medio ambiente y todos aquellos contenidos que les permitan fortalecer sus conocimientos sustentados en la ciencia y no en prejuicios; por otro lado, es importante el acercamiento de los jóvenes con personas cuya sabiduría les permita abrevar de ellos para la conservación de suelos, agua y naturaleza.
Para crear o desarrollar la conciencia verde es importante trabajar de manera permanente en acciones cotidianas y no esperar un año, para repetir lo mismo, por ello, nos parece importante trabajar con los niños, niñas y adolescentes en inculcar el respeto a la naturaleza, realizar recorridos y disfrutar lo estético de los espacios abiertos, impulsar acciones relacionadas con diseño, preparación y atención de espacios verdes, construcción de jardines, huertos, así como la adopción de un árbol; pero también el cuidado del agua, y desde luego el respeto a los seres vivos.
En fin, existen una serie de acciones y actividades, no solo públicas, sino desde el interés personal y de la familia, para establecer los criterios que los padres podríamos dejar a nuestros hijos en atención a cuidar los derechos de la naturales, del cuidado de la biodiversidad y el no impactar al medio ambiente.
Otro tema que planteaban el día de ayer los jóvenes, era el manejar los residuos sólidos, lo que usualmente le llamamos “basura” (en mi recorrido salude a una mujer de la tercera edad que pepenaba basura en un gran colector público, ella, me expresó que conjuntamente con su marido trabajan para ganar el pan diario, porque sus hijos no tenían como ayudarlos), en este sentido y derivado de muchos estudios y propuestas existen 6 acciones para atender esta problemática de los residuos sólidos, y que son las “6 R”; reciclar, reducir, reutilizar, pero se unen a estas tres “R”, el revalorizar, reestructurar y redistribuir; cada una de estas propuestas permiten mejorar nuestra calidad de vida y la de nuestro entorno.
El día de ayer, 12 de Agosto, decenas de jóvenes salieron hacer actividades, lo hicieron con la emoción y la pasión que da expresar su juventud y las ganas de transformar las realidades sociales, y de impacto ambiental, lo mismo estuvieron en Maravatio, que en Apatzingán, Tacámbaro, Peribán, Ciudad Hidalgo y aquí mismo en Morelia.
Vaya mi reconocimiento y respeto por todos aquellos jóvenes que están generando acciones, aun cuando pudieran ser calificadas de muy poco significativas, pero que no lo es, porque estamos generando la conciencia verde y eso es más que significativo en este momento para los jóvenes. Por ello diría, “un joven un árbol” y México, tendría al menos más de 30 millones de árboles sembrados.
Desde mi modesta trinchera, hago un reconocimiento a todos esos héroes anónimos que el día de ayer, utilizando su tiempo, su esfuerzo, y su compromiso por México, salieron a defender los derechos de la naturaleza, a ustedes muchas gracias, como también gracias a todos aquellos que hicieron posible la reforestación en distintos sitios de Michoacán: Xicoténcatl Duarte Palacios, Vania Díaz Villanueva, Jorge Osnaya González, Jimena Delgado, Anayeli Bolaños, Alejandra Cruz, Estefanía Medina, Ángel Solís, David Álvarez Pedraza, Alfredo Arroyo, Josué Centeno, Felipe Ponce, Karin Viveros, Susana Rangel, Lupita Sandoval, Gema Cisneros Silva, Jonatán Villa, Antonio Correa.