Livia Brito expone el acoso de un paparazzi y cómo afecta su bienestar emocional.
Ciudad de México.-Livia Brito, la reconocida actriz, ha vuelto a hablar sobre su batalla legal con el paparazzi Ernesto Zepeda, destacando el severo daño emocional causado por ciertos sectores de la prensa.
A través de un video en sus redes sociales, la actriz de origen cubano defendió su conducta frente a este asedio que ha durado casi cinco años, señalando que la motivación de Zepeda es meramente económica.
“Quiero aclarar muchas cosas que durante cuatro años se han tergiversado por algunos medios de comunicación, dañando la salud emocional mía y de mi familia, mi salud psicológica, dañando mi imagen, manchando mi carrera y que durante estos cuatro años he tenido que callar por todos los procesos legales que he tenido que enfrentar y que aún hoy en día continúan”, expresó Brito.
“Quiero mostrarles un video de entrevistas donde el paparazzi Ernesto Zepeda cuenta todo lo sucedido hace cuatro años cuando todo esto empezó. En el 2020, cuando estaba en Cancún, Quintana Roo, pasando mis vacaciones, me percaté de que el señor Ernesto Zepeda estaba acechándome”, continuó.
En el video, Zepeda explica cómo obtuvo la información de la ubicación de Brito:
“Hay muchos contactos en todos lados que te avisen ¿Quién está?, ¿Quién va a llegar?, ¿Cuándo se va?, con quién viene, todo lo más que se pueda que te den de información para poder utilizarla. Y el día domingo fui a buscarlos”.
Livia Brito, de 38 años, describió cómo Zepeda la fotografiaba sin permiso para luego vender las imágenes: “Estaba escondido tomándome fotografías sin mi consentimiento para luego lucrar y venderlas a las revistas”.
Tras ser descubierto, Brito confrontó a Zepeda:
“Me acerqué a él y le pedí en varias ocasiones que borrara las fotos. ¿Por qué? Porque yo estaba en un momento privado con mi pareja, estaba en mis vacaciones, estaba en traje de baño, no estaba trabajando. Y le pedí de favor que las borrara. El señor Ernesto Zepeda se negó”.
Brito relató el altercado físico que siguió:
“Y después de varios minutos me empujó, poniendo su mano en mi pecho. Esto se encuentra narrado y firmado por él mismo en la declaración de su primera denuncia penal. Al ver esto, mi expareja me defendió y ambos se hicieron de golpes. Al terminar la pelea, entregamos la cámara al personal del hotel y ellos se la entregaron a las autoridades correspondientes. Procedí a hacer una denuncia por invasión a la privacidad”.
Finalmente, Brito lamentó la lentitud en el proceso de su denuncia, mientras que las acciones legales de Zepeda avanzan con más rapidez:
“Esta denuncia yo la interpuse hace cuatro años y que hasta el día de hoy no ha avanzado. El señor Ernesto Zepeda ya ha interpuesto tres procesos legales en mí contra los cuales sí han avanzado, dos me han dado la razón a mí y el tercero, que me pide más de un millón de pesos como compensación, está en proceso de amparo de mi parte”, concluyó.