La institución cuenta con un reglamento de convivencia covid y en dos meses de trabajo, no han reportado ningún contagio entre la comunidad estudiantil
Morelia, Michoacán.- Tras el anuncio de que la población económicamente activa podría regresar a actividades el pasado 1 de junio, Yvonne Pineda Márquez, quien dirige el Liceo Michoacano, ya estaba “abriendo las puertas”.
Y es que tras poco más de dos meses de confinamiento, la directora del Liceo Michoacano, entendió que la salud mental es también fundamental para combatir la pandemia mundial, que actualmente aqueja en la salud de la sociedad.
Con apoyo de expertos Yvonne Pineda, aterrizó un documento que se denominó “reglamento de convivencia covid” que consta de 48 artículos en los que se deja claro a estudiantes, docentes, administrativos, trabajadores y padres de familia, los riesgos que implica el modelo híbrido y la manera de combatirlos y evitarlos.
Fue así que luego de un trabajo en equipo entre la comunidad liceísta, se consultó a los padres de familia sobre el innovador esquema de educación híbrida, al que la mayoría estuvo de acuerdo. Es modelo es único en Michoacán y posiblemente en la región centro-occidente del país; ya que la mayoría de escuelas ha optado por el esquema de educación en línea.
El modelo de educación híbrida del Liceo Michoacano, consiste en que nueve de los estudiantes de cada grupo asisten una semana a clases presenciales y el resto lo hace en línea; para la siguiente semana cambian los papeles, de tal manera que la totalidad de alumnos pueda recibir clases presenciales.
Pero ¿qué implicó para el Liceo abrir sus puertas a las clases presenciales, pese a los riesgos por Covid?. Lo primero para Yvonne Pineda fue avisarle al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) que sus trabajadores regresaban a laborar. “Hice todo lo que el Seguro Social recomendó: sistema alternado, cuestiones de seguridad, tapetes sanitizantes, cubrebocas”.
“Me acerqué a la michoacana (es bachillerato incorporado) y les dije que necesito trabajar y que tengo las condiciones para hacerlo: mi población es de 75 estudiantes y 20 maestros y en el sistema híbrido vienen de 30 a 35 estudiantes, más el tránsito de 10 profesores; tengo espacios al aire libre. No somos más de 50 personas, cumplo con las condiciones (…)”.
Yvonne Pineda Márquez, directora del Liceo Michoacano
Yvonne relata cómo el equipo que conforma el Liceo Michoacano levantó la mano para apoyar en lo necesario y brindar educación de calidad a sus estudiantes, de manera presencial y en línea. Fue entonces que se empezaron a hacer las pruebas de sana distancia, las mediciones para los baños, las numeraciones para las bancas y las adecuaciones para iniciar.
En el Liceo cada uno de los jóvenes tiene un número y su lugar ya está definido tanto en los sanitarios, los espacios colectivos (comedores) y salones. De tal manera que hay un control total de cada alumno y en qué espacio estuvo; para, en caso de reportar algún contagio saber específicamente quiénes pudieron estar cerca.
El diseño del reglamento de convivencia covid ha dado hasta ahora, los resultados deseados. De tal forma que en los dos meses que el Liceo tiene trabajando con clases presenciales, no se ha reportado ningún contagio entre la comunidad estudiantil. Y es que además de las estrictas reglas de prevención, se suma el que a la institución, no entra nadie que sea ajeno a ella.
Aunado a las medidas de prevención que diariamente se ejecutan al interior del recinto, por lo menos dos veces por semana hay desinfección por aspersión en cada uno de los espacios de la institución académica; y se sacrificaron además algunos talleres que irremediablemente implican cercanía entre los jóvenes.
“Luchamos muchísimo para lograr esto por parte del IMSS de la SSM de la UMSNH, con la población de padres de familia (…). Tenemos que sacar provecho de las ventajas de la escuela pequeña, de una comunidad responsable, porque es lo que hay en los docentes y tenemos que sobrevivir”.
Yvonne Pineda Márquez, directora del Liceo Michoacano
Para la directora del Liceo Michoacano, la convivencia presencial en la educación básica y media superior es fundamental para el desarrollo integral de las personas:
“La parte humana de la educación en niñez y adolescencia es básico. El proceso de socialización es de los valores mas importante en la formación que le corresponde a la escuela y tiene muchas décadas fallando y se ve en el bullying, la violencia escolar (…) tenemos un país deteriorado desde su clase política y hasta sus formas, hay que cambiar eso”.
Yvonne Pineda Márquez, directora del Liceo Michoacano