Este jueves en sesión del Congreso, se aprobó el exhorto
Morelia, Michoacán.- Que en las oficinas del poder Ejecutivo y Judicial, así como en los 112 ayuntamientos michoacanos y el Concejo Mayor de Cherán, se sustituya el consumo de agua embotellada y se elimine el uso de desechables de plástico o unicel en sus áreas de trabajo, fue el exhorto que hizo la LXXIV Legislatura.
Al argumentar que es poco el tiempo que resta para dar vuelta al cambio climático y prevenir desastres naturales, los legisladores michoacanos exhortaron para que se usen productos biodegradables y menos contaminantes que puedan apoyar en la preservación del medio ambiente.
“La Propuesta de Acuerdo sustentó su exposición de motivos, sustancialmente en lo siguiente: La mayoría de las botellas de plástico y desechables son elaboradas a base de derivados del petróleo, cuya extracción es fuente de gases con efecto invernadero. Los plásticos son materiales que el medio ambiente no puede degradar, al igual que el unicel, son altamente contaminantes porque no se reciclan”.
Además se expuso que México ocupa los primeros lugares en el mundo en consumo de agua embotellada y un índice alto en uso de desechables, que entre ellos las botellas de plástico pueden tardar hasta mil años en desaparecer, además de que en exposiciones prolongadas al sol, podrían contaminar el agua que almacenan y causar daños a la salud.
“Nuestro país enfrenta grandes problemas de contaminación en el suelo, agua y aire, debido al cúmulo de basura, que al no recibir un tratamiento adecuado desde las viviendas dificulta su recolección y manejo de manera óptima”.
En ese tenor, los legisladores recordaron que en las oficinas gubernamentales se consumen diariamente aguas embotelladas y desechables debido a su practicidad; “pero en poco valoramos los efectos negativos que se tienen al usarse habitualmente. En promedio en las oficinas de gobierno se consumen entre 20 y 150 botellas de agua al igual que vasos desechables, y un poco menos de platos, cucharas y tenedores”.