Se llama Alejandro Giammattei Falla. Es de nacionalidad guatemalteca. Tiene 63 años, ojos claros y piel blanca. Es médico profesional y político de oficio.
Lleva muletas. Tiene esclerosis múltiple hace ya muchos años. La muerte ha coqueteado con él en cuatro ocasiones. En todas la ha vencido.
También ha sido cuatro veces candidato a la presidencia de su país. Esa determinación, constancia y tozudez le ha sido compensada. Está en la segunda vuelta de la elección que se desarrollará en agosto próximo.
Es el candidato del partido centroderechista Vamos. Va contra la empresaria y exprimera dama Sandra Torres, de UNE. El hombre está en México. Visitó ayer el Senado. Nos pareció interesante hablar con él sobre la crisis humanitaria que viven los migrantes.
-¿Qué sintió al ver la imagen de Óscar y su hija Valeria, salvadoreños, ahogados en el río Bravo?
-Vergüenza de ser humano. ¡Imagínese el acto de desesperación que eso significa!
Conmovido, nos contó que, el año pasado, una de las muertes que lo marcó fue la de Mónica González, una muchacha guatemalteca recién graduada de bachiller.
Ella tenía 18 años cuando decidió irse a Estados Unidos con otros tres amigos de la escuela. Se subieron a La Bestia, atravesaron México. Después de varias semanas lograron llegar a la línea y cruzar a Estados Unidos.
“La guardia les marcó el alto. No lo respetaron. Le dispararon y la mataron. Se subió a La Bestia para llegar, ¿a dónde?, ¿a morirse en una frontera?
“Es exactamente lo mismo que vemos ahorita con el caso de Óscar y Valeria o hace semanas con una madre guatemalteca y sus tres hijos. Los arriesgó hasta el colmo de la muerte. Murieron en el desierto”.
La noticia es de todos los días.
* Ya encarrerado, dice lo obvio: la crisis humanitaria que estamos viviendo no es nada más que el resultado de décadas de abandono. Evita hablar de Donald Trump.
“Soy de los fervientes convencidos de que nuestros países han dejado de hacer lo que tienen que hacer para mejorar los índices de desarrollo humano”, dice.
No se queda en la exposición verbal. Gane o pierda, propone desarrollar la zona fronteriza binacional Guatemala-México. Formar una Zona Especial Económica con desarrollo industrial.
“El sur de México tiene serios problemas de energía eléctrica. Nosotros tenemos una sobreproducción de energía eléctrica que podemos compartir. También se pueden desarrollar en esa zona un par de proyectos fronterizos para explotar la energía común.
“Otra propuesta que tenemos es la instalación de un banco de inversión para la zona fronteriza Guatemala-México. No son soluciones de Harry Potter. La varita mágica no existe.
“Este es un proceso que debe durar por lo menos diez años. Debemos generar una acción binacional para generar muros de prosperidad. Yo no creo en los muros físicos ni en los muros de armas.
Hay que atender cinco cosas: salud, educación, seguridad, empleo y vivienda. Si la gente tiene esas cinco cosas, ni de locos se mueven. Cuando estas cosas no se atienden, hoy la gente no toma las armas, toma la mochila para irse”, puntualizó.
* La Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural desmintió ayer a legisladores morenistas que aseguraron que esa dependencia va a correr, este viernes, a mil 500 trabajadores de confianza.
“Es falso”, dice un comunicado enviado a nuestro WhatsApp.
Esos legisladores son los presidentes de las comisiones de Agricultura en ambas cámaras: José Narro Céspedes, en el Senado, y Eraclio Rodríguez, en Diputados.
“Se estima que sólo sean 400 los empleados que se apeguen a estas disposiciones señaladas (de recibir indemnización constitucional), además de los 288 que regresan a su base”, precisa el comunicado de la dependencia.
Buscamos a Narro para que nos dijera de dónde sacó la cifra que dio. Le pidió a sus colaboradores que nos enviaran copia de la circular donde se informa de los despidos. Nunca llegó.