kuno becker y su hija

Kuno Becker enfrenta la paternidad de su hija eligiendo un camino diferente al de sus padres

Ciudad de México.- Kuno Becker está viviendo con entusiasmo su rol como padre desde el pasado mes de abril, cuando dio la bienvenida a su hija al mundo. El actor, sin embargo, ha decidido no repetir los patrones negativos de crianza que experimentó en su infancia.

En una conversación con el programa *Ventaneando*, Becker reveló que ha cortado lazos con su madre, lo que implica que su hija no tendrá contacto con su abuela.

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“No quiero nunca llegarle a decir ‘hice esto por ti, me debes esto o aquello’, es algo que yo como hijo de pronto no se me hacía tan chido escuchar”, compartió el actor sobre su decisión.

Kuno explicó que su distanciamiento de sus padres se debe a un ciclo de manipulación y culpa que no desea perpetuar.

“Claro de [decirme] ‘gracias a mí tienes tal educación, gracias a mí hablas tales idiomas… y es que si no vienes, yo me siento como abandonado’, o sea, todo el rollo de manipulación por medio la culpa, entonces yo mantenía al papá, entonces yo mantenía a este y al otro, y aparte no era mi chamba”.

Aunque el actor de 46 años ha perdonado a sus padres, enfatiza que no busca una reconciliación, pues prioriza la armonía en su vida actual.

“Como te digo, y lo que pasa es que mi papá ya se murió, yo siempre lo he dicho, yo tuve al mejor papá del mundo, porque me enseñó todo lo que no se debe de hacer, entonces si yo voy en contra de eso, soy una persona medianamente decente”, dijo, destacando las enseñanzas indirectas de su padre.

Al hablar de su madre, Kuno afirmó que no mantienen una relación porque busca un ambiente positivo para su familia, y lamentablemente, ella no comparte esa visión.

Finalmente, Becker compartió su alegría al presenciar el nacimiento de su hija, asegurando que participó de manera activa pero desde una perspectiva que no fuera traumática.

“Sí, claro, en el ángulo correcto güey, porque sí una de las enfermeras me dice: ‘mira, asómate, ¿te quieres asomar?, ya está asomando la cabecita, y le dije ‘¿por?, no, no me quiero asomar’… ‘¿quieres cortar el cordón umbilical?’, y yo ‘claro, si hasta traigo mis propias tijeras’, fue padrísimo, claro que lo hice”, concluyó con entusiasmo.