Morelia, Michoacán.- Luego de que el presidente de la Asociación de Industriales del Estado de Michoacán A.C (AIEMAC), Ricardo Bernal Vargas, señalara que harán las gestiones necesarias para que sea una empresa michoacana la que se denomine “ancla” en la Zona Económica Especial (ZEE) del Puerto de Lázaro Cárdenas; el delegado de Economía en la entidad, Salvador Abud Mirabent, vio pocas posibilidades para que sea de esa manera, debido a que no hay la capacidad necesaria para ello en la empresas del estado.
“Veo difícil que esto suceda, no veo una empresa del tamaño que se requiere para se la primera y ser además una empresa ancla y no creo que debamos casarnos con esta idea, una Zona Económica Especial está abierta al mundo. Hay que buscar lo mejor del mundo pero hay que pensar cómo nos colgamos de esa economía”, explicó luego de mencionar que el decreto que el presidente de México, Enrique Peña Nieto, hizo para que los estados más rezagados alcancen a los primeros, deben obligar a estas entidades a buscar lo necesario para crecer.
Por ello, reiteró que será complicado que una empresa michoacana tenga el tamaño y la capacidad suficiente para estar como ancla, es decir, que sea la primera instalada que atraiga inversiones nacionales o extranjeras debido al éxito obtenido. “El instalar una empresa de talla mundial nos tendrá que obligar a colgarnos de esa economía generando proveeduría y tratando de encontrar cadenas de valor que provoquen que esta empresa se quede en Michoacán y nos permita crecer”.
Al respecto, mencionó que lo ideal sería una empresa “altamente” generadora de valor, debido a que no es posible que de Michoacán, donde ya existen minas de hierro se saque el mineral y se envíe a las fundadoras de Monterrey para transformarse. Pues con la ZEE lo que se busca es precisamente que sea en la propia entidad, donde se haga la transformación del material que se extrae de las minas, o de los productos del campo, es decir que haya empresas de agroindustria que favorezcan en su totalidad a la economía michoacana.
En el tema de la vocación, la ZEE de Lázaro Cárdenas tiene cinco áreas donde se puede incidir, sin embargo, a decir de Abud Mirabent, se continua con los estudios para definirlo y posiblemente acortarlo con el objetivo de pensar específicamente en las cadenas de valor que permitan la instalación de empresas a las que se tenga la capacidad de proveerlas y tener la mano de obra que requieren para su funcionamiento.
“Estoy pensando que Lázaro Cárdenas no solo es el puerto de Michoacán, es el puerto del bajío, de la Ciudad de México, porque tiene un enorme potencial de crecimiento, todavía tenemos gran capacidad desaprovechada y hay que pensar en los clúster para que si salen los coches sin pintar de cualquier empresa, sea en la ZEE donde se desarrolle un trabajo de pintura, que se instale la gran empresa pintadora. Pensar no solo en la agroindustria o el tema minero, el tema de energía; si no el aprovechamiento de todas las cadenas de valor que se generan en el bajío y Ciudad de México”, consideró.