La instalación de las Zonas Económicas Especiales (ZEE), ha provocado interés de inversionistas nacionales y extranjeros, pues ya se cuenta con 118 posibilidades de proyectos, de los cuales, ya avanzan las negociaciones con 24 de estos, que implican una inversión de 7 mil millones de dólares, reveló Gerardo Gutiérrez Candiani, titular de la Autoridad Federal para el Desarrollo de las Zonas Económicas Especiales, durante su participación en la reunión de la comisión enfocada a este tema de la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago), que se llevó a cabo en Lázaro Cárdenas.
Gutiérrez Candiani detalló, “ha despertado un gran interés tanto al interior como al exterior, a la fecha tenemos cerca de 118 posibilidades de proyectos de inversión, 24 en fases avanzadas de negociación que implican ya una cantidad importante de más de 7 mil millones de dólares”.
Asimismo, anticipó que las primeras ZEE se instalarán este año, por etapas, pues expuso, “en la primera etapa va a generarse el primer semestre del 2017 con el arranque de Lázaro Cárdenas, Puerto Chiapas y el Istmo de Tehuantepec, que conforma Salina Cruz y Coatzacoalcos, en la segunda etapa, que es el segundo semestre, el corredor petrolero que es Tabasco, Campeche y Yucatán, y tenemos una tercera etapa para zonas en Puebla e Hidalgo”.
Comentó que para el desarrollo de las primeras ZEE, se prevé una inversión total de 99 mil millones de pesos en los próximos 10 y 15 años, de los cuales, dos terceras partes serán procedentes de la inversión privada.
“Contamos con una identificación de 84 proyectos estratégicos de transporte, logística, agua y energía para las primeras cinco entidades federativas, estos proyectos implican inversiones por más de 99 mil millones de pesos que se contempla poder generar en los próximos 10, 15 años, y donde la participación del sector privado es de cerca de las dos terceras partes”, explicó.
El encargado de echar a andar las ZEE, mencionó la urgencia de qué estas operen, dada la coyuntura de fractura en la relación comercial con Estados Unidos, las necesidades de buscar otros mercados internacionales y de fortalecer el propio mercado interno.
“Urge activar un motor de crecimiento que de mayor solidez a nuestra economía, y en este caso, en las zonas económicas tenemos una oportunidad irrepetible en este sentido, además de la capacidad de transformar las regiones donde se van a ubicar las zonas, y sobre todo con el objetivo de reducir las brechas de desarrollo, generar una alternativa para impulsar el mercado interno, la diversificación de mercados internacionales y la competitividad de México, como eje logístico e industrial”, concluyó.