El director de OOAPAS expone sobre las lluvias recientes y las inundaciones recurrentes en Morelia
Morelia, Michoacán.- En la Avenida Camelinas, casi frente al Palacio del Arte, la carpeta asfáltica se hundió aproximadamente a las 18 horas el pasado jueves, justo donde fue instalado un colector pluvial tras la obra del distribuidor de Mil Cumbres, provocando un socavón de por lo menos dos metros de profundidad, lo que obligará a las autoridades a edificar una caja de concreto hidráulico con una rejilla, con el propósito de que en el futuro, el suelo no se reblandezca al haber un arrastre extraordinario de agua.
En este caso, el agua emergerá a la superficie si los ductos son insuficientes, llevándola por la calle hasta el Río Chiquito y aunque para el director del Organismo Operador de Agua Potable y Alcantarillado de Morelia (OOAPAS), eso no provocará inundaciones, lo cierto es que la zona de Camelinas y Boulevard García de León se convierten en ríos durante la temporada de lluvias.
“Es una situación hipotética, no había pasado en varios años, pero ya se verá”, comentó frente a lo pretendido con la obra y los drenajes que presenta Morelia.
Lo que ha sido el mes de julio ha sido muy lluvioso, más de la media histórica, pretexto Rodríguez por la cantidad de inundaciones que se han dado en la ciudad, aclando que las tormentas puntuales son las que provocan “algunos encharcamientos”.
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Los tubos que conectan a los colectores pluviales del Punhuato y salida Mil Cumbres tienen una capacidad de 48 pulgadas cada uno, lo que le permite un tránsito de hasta dos metros por segundo, sin embargo fueron insuficientes al taponarse por la cantidad de lluvia que bajó en la zona pero también por la basura que arrastra el agua, explicó Oswaldo Rogríguez Gutiérrez.
El funcionario de la paraestatal precisó que la falla del colector pluvial, se debió a la cantidad extraordinaria de agua que en un par de horas cayó sobre el lado Oriente de Morelia, sin embargo al revisar la tubería, la basura salió a relucir, provocando taponamientos en los ductos.
Al revisar la tubería, se encontraron restos de un sillón, mencionó, alertando que uno de los grandes males para drenajes y escurrimientos de agua son la basura.