Fue el hijo de el Divo de Juárez, Ivan Aguilera, quien entró al Palacio de Bellas Artes con la urna en la que descansan sus cenizas para recibir el homenaje que el pueblo de México le brinda a uno de los cantautores más importantes del país.
Acompañado de su esposa y el titular de Cultura, Rafael Tovar y de Teresa, así como la directora de Bellas Artes, Iván colocó en el centro del recinto en un pequeño soporte que se instaló para ese fin. Luego de ello, hicieron una guardia de honor que a los minutos, fue sustituida por los gobernadores de Chihuahua y Michoacán, César Duarte Jáquez y Silvano Aureoles Conejo, respectivamente.
Además de Martín Urieta, compositor también michoacano, Roberto Cantoral (hijo) y otros personajes. El tenor Fernando de la Mora y Aída Cuevas, fueron los primeros en interpretar tres de sus éxitos: amor eterno, te lo pido por favor y que seas muy feliz, fueron los temas a cargo de estas voces.
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