La cronista municipal, Juana Antonieta Zúñiga Urbán explicó que durante las obras de introducción de drenaje que se realizaron el 22 de diciembre pasado sobre la Avenida Saucera, de manera accidental se hallaron partes de una osamenta de grandes dimensiones, que de inmediato fue corroborado que se trataba de un mamut.
Sin embargo, por estar a sólo días del cambio de administración, el anterior gobierno prefirió tapar el lugar del hallazgo para evitar el deterioro y saqueo de piezas, hasta lograr la autorización del Consejo de Arqueología para excavar, que es el máximo órgano que regula la arqueología en México.
Ante ello, el actual gobierno solicitó al Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), el rescate de esta osamenta, y el órgano federal designó al arqueólogo Luis Córdoba Barradas como responsable del proyecto y a su colega Felipe Muñoz como asistente, quienes con una cuadrilla de colaboradores operativos del gobierno municipal, trabajan en la recuperación de los restos.
En conferencia de prensa, señala una nota del periódico Excelsior, el encargado de rescatar los restos del mamut informó que los trabajos iniciaron el 25 de abril.
Aseguró que el alcalde Armando Portuguez Fuentes giró instrucciones para que todas las áreas brindaran las facilidades a los arqueólogos para llevar a buen puerto las excavaciones, que se estima durarán tres semanas más.
Córdoba Barradas explicó que las características de los mamuts eran muy parecidos a los elefantes que hoy conocemos, y median aproximadamente 3.5 metros de altura por seis de largo.
Precisó que hasta el momento se han encontrado cerca de 30 huesos, entre ellos el cráneo, las escápulas, varias vértebras, costillas y huesos de las patas; aunque se está ampliando la excavación porque aún no se localizan la totalidad de los restos por lo que se desconoce si el ejemplar está completo.
De acuerdo con los arqueólogos que trabajan en el rescate, los restos de este ejemplar tienen una antigüedad al menos 10 mil años, aunque los mamut habitaron la cuenca de México desde hace más de 70 mil años en esta zona que estaba compuesta por lagos como son el de Zumpango, Xaltocan y San Cristóbal; factores que se combinaron para la conservación de estos restos.
Córdoba Barradas explicó que parte del proceso es ir haciendo el registro de cómo se encontraron los huesos y a qué profundidad con fotografías y dibujos, para que cuando se saquen las piezas se tenga claro cómo se encontró cada hueso y determinar y analizar que piezas están y cuáles faltan para interpretar de la mejor manera qué pasó con este ejemplar.
La cronista municipal, Juana Antonieta Zúñiga Urbán, dio a conocer que una vez que concluya el rescate del mamut, el gobierno municipal solicitará al INAH su reconstrucción y de ser posible la autorización para exhibirlo en la localidad, para que en caso de aprobarse los restos quedarían expuestos al público en la Casa de Cultura de Tultepec.