El alcalde de Tangancícuaro da un giro tras el caso de Buba y Canela, inaugurando un centro de atención animal y un memorial en su honor
En Tangancícuaro, Michoacán, la comunidad quedó consternada y expresó su repudio por el asesinato de las perritas Buba y Canela, perpetrado por el presidente municipal David Melgoza Montañez en agosto de 2023.
Los hechos se hicieron públicos mediante videos en redes sociales que mostraban el maltrato animal extremo en la calle Vicente Suárez, cerca de la colonia Santa Anita. Un joven, al perder de vista a las perritas tras salir por su motocicleta, las buscó y al volver encontró al alcalde apuntando y disparando a las mascotas. Las cámaras de seguridad captaron a Melgoza Montañez y acompañantes persiguiendo a Buba y Canela, desapareciendo del encuadre y luego alejándose del lugar.
La viralización del incidente provocó una ola de condenas por parte de la sociedad civil, figuras políticas y la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Michoacán (CEDH).
Ante la presión, el alcalde ofreció disculpas y comprometió la creación de un albergue-escuela para animales sin hogar. “Lo que quiero comunicar es mi más sincera disculpa de que su servidor va a cuidar y a proteger los animales, una de las situaciones que vamos a hacer para ayudar a los animales desprotegidos de la región va a ser crear un albergue-escuela, para todos los animales que no tengan un hogar”, declaró.
Posteriormente, la CEDH medió en el acuerdo que incluía la construcción de un centro de atención animal en Tangancícuaro.
Hoy, con la presencia del Visitador Regional de Zamora de la CEDH, Juan Jaime Contreras Vega, se inauguró el Centro de Atención Animal de Tangancícuaro y se presentó el Memorial dedicado a Buba y Canela. Este espacio no solo honra la memoria de las perritas sino que también sirve como un recordatorio intergeneracional y pedagógico para prevenir la repetición de actos similares.
Con estas acciones, el Centro Animal Tangancícuaro se convierte en un símbolo de cambio y esperanza para la protección animal en la región, cumpliendo así el acuerdo alcanzado tras el incidente de Buba y Canela.