narcocultura en México sometimiento comunidades

Explorando cómo la narcocultura y la coerción social moldean comunidades en México, a través de estilos de vida cotidiana

En regiones como Chiapas, donde la guerra entre tres cárteles criminales se intensifica, se refleja una realidad que se extiende por gran parte de México. En áreas sin conflictos abiertos, el dominio de un solo grupo tampoco garantiza paz o seguridad, dejando a miles bajo el impacto de la narcocultura y la coerción social.

Las manifestaciones de la narcocultura incluyen series de televisión, ‘música bélica’ y narcocorridos, elementos que Nancy Estrella Chávez Llamas describe en su investigación como:

“Estilo de vida definido por significados, códigos de conducta, sistema de valores, actitudes, creencias, costumbres, expresión de intereses, formas simbólicas objetivadas e internacionalizadas en la vida cotidiana, que hacen referencia al narcotráfico, y que han sido institucionalizadas por ciertas personas de la cultura dominante.”

Originada en Badiraguato, Sinaloa, esta cultura permea especialmente en ciudades como Culiacán y Mazatlán, donde los narcocorridos son un elemento crucial para la identidad juvenil. En Michoacán, textos que glorifican a criminales como Nazaro Moreno de La Familia Michoacana circulan para justificar sus actos delictivos.

Edgar Guerra, del CIDE, menciona que en Sinaloa, los cárteles proporcionan no solo dinero, sino también un sentido de poder y estatus social, lo cual es atractivo para muchos jóvenes. En Chiapas, la lucha entre el Cártel de Sinaloa y el Cártel Jalisco Nueva Generación ha llevado a un aumento dramático en homicidios y otros crímenes como extorsiones y desapariciones forzadas.

Las comunidades, enfrentadas a la violencia y la precariedad, a menudo se ven obligadas a colaborar con los cárteles, ya sea por seguridad o por necesidad económica, en estados como Guerrero, Michoacán y más allá. Estas prácticas subrayan una coerción que trasciende la simple base social, transformándose en una amenaza directa a la estabilidad y seguridad de las poblaciones locales.

Fuente: Narcocultura y coerción social: las herramientas del crimen organizado para someter comunidades enteras