El jerarca católico, señaló que ya tiene comunicación directa con Alfonso Durazo y se le ha planteado la estrategia para pacificar al país
Morelia, Michoacán.- El plan de construcción de paz que propone la Iglesia Católica a la Secretaría de Seguridad Pública y Protección Civil, considera como prioridad la atención a las víctimas de la violencia y capacitación a civiles y autoridades a fin de lograr una plataforma social en la que se pueda encontrar el camino para la pacificación nacional.
Así lo informó el arzobispo de la Arquidiócesis de Morelia, Carlos Garfias Merlos, quien destacó que la comunicación ya es directa con el secretario de Seguridad, Alfonso Durazo Montaño y que se han tenido ya varias reuniones con diferentes iglesias y la autoridad, en donde se presentó el plan de construcción de paz que promueve la Iglesia Católica.
Todo ello, a pesar de que el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ya no ha tocado el tema de los foros de pacificación y la coordinación que se tendría con todas las expresiones religiosas, en las que incluso solicitó el apoyo del Papa Francisco para que “guiara” las acciones que se implementarían en la construcción de la paz.
Ante ello, Garfias Merlos, destacó que la comunicación continua, aunque no detalló cuándo será que tengan el plan (en el que se incluirán propuestas de las otras iglesias, autoridades y sociedad civil) para que se empiece a aplicar, sobretodo en las zonas consideradas como “foco rojo”.
“La Arquidiócesis directamente está aportando para la elaboración de un plan nacional de construcción de paz, que juntamente con las demás iglesias, las organizaciones, instituciones de la sociedad civil y con el gobierno federal y demás niveles de gobierno podamos esperar de este Plan Nacional de Desarrollo, la verdadera transformación humana integral, que promueva y logre hacer realidad en la vida pública del país un mayor bienestar para todas y todos”, explicó.
Y es que esta semana iniciaron los diálogos para el “Plan Nacional de Desarrollo”, en el que se incluye la pacificación y reconciliación, tema que fue toral en los foros que se hicieron antes de iniciar el gobierno y en el que se involucraron la Iglesia y la academia, así como activistas sociales. Este plan tiene tres ejes generales: La Justicia y el Estado de Derecho y el Bienestar y Desarrollo Económico.
Además, incluye tres ejes transversales: la igualdad de género, no discriminación e inclusión; el combate a la corrupción y mejora de la gestión pública; y el territorio y desarrollo sostenible. Que a decir del sacerdote, lograrían de aplicarse coordinadamente, el desarrollo nacional con solidez, dinamismo, competitividad y democratización política social y cultural del país.
“La Iglesia bajo la guía de los derechos humanos fundamentales, así como en su búsqueda del desarrollo humano integral que impulsa la pacificación y la reconciliación, seguirá en la mejor disposición de comprometerse y colaborar con la debida interlocución definida”.