“Ha faltado la acción de los cristianos que no hemos sabido responder a tiempo y con firmeza a la desintegración del tejido social”, expresó el nuevo Arzobispo Carlos Garfias Merlos, durante la ceremonia de sucesión para la titularidad de la Arquidiócesis de Morelia.
Durante su intervención en la eucaristía de este día y ante un estadio Venustiano Carranza con la presencia de miles de feligreses, Garfias Merlos expresó, “si bien esta violencia es producto de muchas distorsiones sociales y la acción incontrolada del crimen organizado, no se me escapa el hecho y lo asumo como un desafío de que en este entorno ha faltado la acción de los cristianos que no hemos sabido responder a tiempo y con firmeza a la desintegración del tejido social”.
Insistió en que los predicadores de la Iglesia Católica, “no hemos sabido dar un testimonio eficaz en la misión de evangelización que el señor nos ha encomendado en este mundo”.
El nuevo Arzobispo de Morelia, quien agradeció el reconocimiento de su antecesor, Alberto Suárez Inda, insistió en que se requiere reorientar el camino hacia la paz y la reconciliación, frente a un contexto de violencia, injusticia, corrupción e impunidad que atraviesa nuestro país.
Al respecto, mencionó, “en este momento que vive nuestro país y necesitamos más que nunca encontrar en Cristo nuestra paz y un camino de reconciliación, para dar una respuesta eficaz a la violencia e injusticia, la corrupción y la impunidad que se han aposentado en nuestra patria y que son el caldo de cultivo del descontento creciente”.
Garfias Merlos llamó a todos los presentes a una conversión en la que se brinde la orientación debida a los jóvenes para que no caigan en “las garras del mal”.
“Estamos en una tierra de jóvenes y ellos deben ser no nuestra preocupación, sino nuestra ocupación, soñemos con jóvenes vivos, lejos de las garras del mal”, expresó.